La Quebradora recibe reconocimiento en construcción sustentable
El parque hídrico La Quebradora, ubicado en la delegación Iztapalapa, de la Ciudad de México, recibió el Premio Oro del Global Lafarge Holcim Awards 2018, por su innovación en el diseño y construcción de infraestructura sustentable.
El premio también reconoce la función social, ecológica y económica del parque en beneficio de la comunidad.
Los ganadores, que ya habían sido anunciados en abril, recibieron el galardón este lunes en el Palacio de la Escuela de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El Premio Plata fue para un complejo religioso y secular en Nigeria, que reinterpreta la construcción local tradicional en una nueva mezquita y un centro comunitario. En tanto que la medalla de bronce se la llevó un proyecto de planificación vecinal comunitario denominado "Grassroots Microgrid" en Estados Unidos.
El parque La Quebradora, primer proyecto hídrico en México, es una iniciativa que comenzó en 2017, impulsado durante la administración de Dione Anguiano Flores, actual jefa delegacional en Iztapalapa.
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La idea es desarrollada de manera conjunta con el investigador Manuel Perló de la UNAM y Loreta Castro de Taller Capital, con el propósito de crear infraestructura para el manejo del agua y crear un cinturón verde que mejorará las condiciones de vida de los iztapalapenses.
Al recibir el premio, Perló reconoció el impulso y determinación de la jefa delegacional por sacar adelante el proyecto, a pesar de las dificultades, el cual ya está en la segunda fase de construcción, subrayó el investigador de la UNAM.
"La Quebradora tiene como función principal mitigar las inundaciones que ocurren en el cruce de Avenida Ermita y la calle de Minas e infiltrar al subsuelo el escurrimiento de agua que baja por la Sierra de Santa Catarina", explicó Loreta Castro.
Añadió que se incluirá una planta de tratamiento de aguas residuales para abastecer el riego del parque, captar la lluvia y generar agua potable para consumo humano.
"Esta obra mejorará la movilidad del transporte público, generará su propia energía eléctrica a través de paneles solares y tendrá espacios para todos los grupos sociales con un enfoque comunitario", puntualizó.
El parque posee una extensión de cuatro hectáreas de superficie y hasta ahora se ha culminado el trazo, nivelación, construcción de muros, dragado de reservorios, así como la captación y conducción de agua pluvial.
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En la primera fase de la obra, anunció la delegación, trabajadores del gobierno delegacional retiraron 115,000 toneladas de escombro, 14,000 metros cúbicos de azolve, colocaron 72,000 metros de tepetate para relleno y construyeron muros de piedra braza que delimitan los reservorios para almacenar el agua que se filtrará al subsuelo.