Pemex, por primera planta solidificadora de azufre en México
Pemex, construirá la primera planta solidificadora de azufre en México, la cual estará ubicada en la Administración Portuaria Integral de Coatzacoalcos, Veracruz, con una capacidad de proceso de 360,000 toneladas anuales y una inversión superior a 500 millones de pesos (mdp).
Lo anterior con el propósito de garantizar el desplazamiento del azufre de las distintas refinerías y complejos procesadores de gas del país, PMI Trading Ltd. (PMI), filial de Pemex.
Al encabezar el evento en el que se firmó el acuerdo respectivo entre PMI y Pemex Gas y Petroquímica Básica (PGPB), el director general de Pemex, Emilio Lozoya Austin, resaltó que este proyecto es un ejemplo del dinamismo que debe caracterizar a las diversas áreas de la empresa para unir esfuerzos en el desarrollo de proyectos conjuntos y lograr que sea más eficiente y rentable en el uso de los recursos para ampliar la infraestructura.
El acuerdo comercial de largo plazo alcanzado entre dicha filial y Pemex Gas, establece que PGPB aportará casi 40% e su producción de azufre líquido (la cual asciende a un millón de toneladas al año), para ser solidificado, lo cual permitirá a PMI, en su calidad de comercializador internacional del azufre, participar en otros mercados como China, India, Brasil y países del Mediterráneo, que consumen azufre sólido.
Actualmente, PMI es un comercializador importante de azufre líquido en Tampa, Florida, y Morehead City, Carolina del Norte, principales mercados de Estados Unidos. A lo largo de los años, PMI ha establecido relaciones comerciales directamente con los productores de fertilizantes fosfatados en EUA y es considerado como un proveedor altamente confiable.
Este proyecto reviste gran importancia estratégica para Petróleos Mexicanos, ya que, como resultado de los proyectos de producción de combustibles limpios, se espera un incremento de más de 50 por ciento en la producción de azufre, el cual requiere ser desplazado oportunamente para garantizar una operación estable y rentable de la infraestructura petrolera.
La operación de esta planta solidificadora garantizará, entre otros beneficios, la continuidad del procesamiento del gas y sus líquidos, al poder desplazar el azufre que se elimina de éstos; la reducción de costos al simplificar los procesos cuando se maneja en estado líquido; y ofrecerá beneficios ambientales, al evitar que las partículas de azufre se dispersen cuando se encuentra en estado sólido.