La FIFA admite responsabilidad con obreros de Qatar 2022
La Federación Internacional de Futbol (FIFA) reconoció este viernes "una parte de responsabilidad" en la situación de los trabajadores inmigrantes de las obras para el Mundial de Qatar 2022, insistiendo en que no tiene el poder para solucionar el problema en solitario.
"Tenemos una parte de responsabilidad", admitió el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, que se centró en esta cuestión y no abordó las acusaciones de que hubo corrupción en la atribución de esa Copa del Mundo de 2022 al país del Golfo Pérsico.
"Insistimos en que las responsabilidades recaen primero en el estado de Qatar y segundo en las empresas de los trabajadores", destacó Blatter. "Podemos a través del futbol resolver este problema", señaló.
El jefe supremo de la FIFA recordó que se había reunido con las autoridades cataríes en el mes de noviembre y que le habían transmitido "toda la intención del estado de Qatar para resolver este problema". Blatter visitará Catar antes del Congreso de la FIFA, que tendrá lugar en los días previos al Mundial de Brasil, en el mes de junio.
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El alemán Theo Zwanziger, uno de los miembros del Comité Ejecutivo, ha intensificado en los últimos meses, en nombre de la FIFA, las conversaciones con el Comité Local de Organización del Mundial 2022, así como con organizaciones de defensa de los Derechos Humanos, sindicatos y el Parlamento Europeo, para tratar de ver cómo mejorar las condiciones laborales de estas personas.
"Todas las partes deben trabajar juntas para que la situación mejore", destacó Zwanziger. "Debemos tener una imagen clara y precisa de la situación", señaló.
Desde el mes de septiembre, sindicatos y organizaciones no gubernamentales han venido denunciando las condiciones laborales que viven trabajadores en Qatar, señalando que en algunos casos se aproxima al esclavismo.
Los más vulnerables serían los inmigrantes, principalmente de otros países de Asia, que acuden a este emirato para trabajar en las obras de construcción de infraestructuras.
Acusaciones de corrupción
Con ese Mundial de 2022, la FIFA se expone a un escándalo. El Daily Telegraph relanzó esta semana la tesis de que Qatar había logrado la sede del evento, por delante de Estados Unidos, mediante la compra de votos.
"No puedo y no quiero hacer ningún comentario", repitió Blatter, preguntado sobre esta cuestión por un periodista del diario británico.
La FIFA remite a una investigación sobre la atribución de ese Mundial que está llevando el presidente de la Cámara de Investigación de su nuevo Comité de Ética, Michael Garcia.
"Estoy contento con que ahora contemos con un Comité de Ética independiente", destacó Blatter. "Mientras el caso esté abierto, no haré ningún comentario", dijo.
Según el Daily Telegraph, hay documentos que muestras que Jack Warner, quien era vicepresidente de la FIFA en el momento de la votación, así como miembros de su familia, recibieron 1.43 millones de euros de una empresa del catarí Mohamed Bin Hammam, presiente entonces de la Confederación Asiática de futbol.
Dos hombres ya fueron acusados de haber intentado comprar votos en la batalla por la presidencia de la FIFA, en mayo de 2011, y ya no están en la Federación.
Sobre el Mundial de 2018, atribuido a Rusia, Blatter señaló que no se habían planteado retirar la sede al país por la reciente crisis política con Ucrania.
"La Copa del Mundo fue votada y concedida a Rusia. Seguiremos adelante con el trabajo", apuntó.