Ponen en marcha obra para unir a Guatemala, México y El Salvador
La ampliación de la carretera de Guatemala que conectará a México y El Salvador, fue puesta en marcha y avanza conforme el cronograma, según fuentes empresariales ligadas al proyecto.
La obra, considerada “un gran reto” ingenieril, es clave en el programa de competitividad que impulsa el gobierno del presidente Otto Pérez Molina (2012-2016), que gestiona un financiamiento de 400 millones de dólares (mdd) para la carretera que unirá ambas fronteras.
Pérez Molina, quien inauguró los trabajos de la primera fase de la obra en mayo de 2013, informó que los trabajos son financiados por los bancos Nacional de Desarrollo de Brasil y el Centroamericano de Integración Económica.
La empresa GeoCon, filial de una corporación guatemalteca con presencia en Centroamérica y que opera cinco fábricas de concreto, realiza los estudios de suelo y control de calidad de la obra que ejecutará una constructora brasileña.
Informó que los trabajos corresponden a la primera fase de la ampliación de la carretera CA-2, que unirá las fronteras de México (noroeste de Guatemala) y El Salvador (sureste).
La autopista será una de las más importantes del país y excede los 130 kilómetros, desde Cocales, sureño departamento de Escuintla, hasta Tecún Umán, occidental departamento de San Marcos.
La carretera tendrá más de 75 puentes de unos 20 metros de largo.
“Se están realizando estudios geotécnicos y geológicos muy minuciosos, tramo por tramo, los cuales consisten en ensayar y estudiar el suelo y subsuelo”, dijo el responsable del área de Geología de la constructora, Alessandro Faes.
Indicó que tras completar este trabajo, que incluye determinar las propiedades físicas, químicas, mecánicas y dinámicas del terreno, se presentará un informe detallado en el cual se basará la construcción de la carretera y puentes.
Estos análisis “buscan que la ruta sea segura para los usuarios, reduzca riesgos, sea soporte para cualquier tipo de transporte, estudie su comportamiento durante un sismo de gran magnitud y alcance la mayor estabilidad y capacidad para una carretera”, dijo.
Explicó que en Guatemala existen pocos estudios de riesgo y si bien se han realizado en algunos proyectos, estos sólo hacen referencia a los fenómenos y no tienen en cuenta la vulnerabilidad de los mismos.
La constructora Norberto Odebrecht, multinacional brasileña líder, tiene a su cargo la construcción de la carretera y en conjunto con GeoCon, trabaja “a un nivel con el cual nunca se había construido una carretera en el país”, afirmó.
Coincidió con el gobierno en que la nueva carretera significa desarrollo para Guatemala y representa un gran reto en tecnología y seguridad, que se cumplirán por la experiencia aplicada de empresas líderes.
Según la empresa a cargo de los trabajos de la primera fase del proyecto, se han elaborado más de 1,000 ensayos mensuales, 700 sondeos y perforado más de 5,000 metros de suelo.
Además de una serie de vuelos no tripulados para obtener modelos tridimensionales del terreno. La empresa constructora guatemalteca espera que los estudios finalicen en 2015.
