Francia y España duplicarán intercambio de electricidad con nueva línea

Francia y España podrán doblar en junio próximo su capacidad de intercambios de electricidad, gracias a una nueva línea enterrada de triple récord, inaugurada simbólicamente el viernes en Montesquieu-des-Albère (sur de Francia) por el presidente del gobierno español Mariano Rajoy y el primer ministro francés Manuel Valls.

Una obrera francesa y un obrero español conectaron al mediodía en el túnel subterráneo (de 64 kilómetros, un récord) dos cables que representan la nueva línea, provocando su iluminación en azul.

Los dos jefes de gobierno, que ensalzaron esta "proeza tecnológica", descubrieron después una placa conmemorativa. Tras ello pronunciaron sendos discursos ante un centenar de invitados de los dos países.

"Este proyecto supone un paso importante en la consecución del objetivo de la Unión Europea energética, es decir la  creación de un verdadero mercado interior de la energía", declaró Mariano Rajoy, recalcando que se trata de "un proyecto de capital importancia para el futuro de Europa".

"Podemos decir que no hay Pirineos a la hora de impulsar la prosperidad de Francia y de España", recalcó el presidente del gobierno español.

Valls rindió homenaje a "los ediles que se batieron" para lograr "la línea eléctrica enterrada que preserva nuestros paisajes".

"De esta interconexión se habló durante 25 años, pero desde 2008 y la decisión de los gobiernos, el proceso fue rápido", dijo Dominique Maillard, presidente del directorio Red Transporte de Electricidad (RTE), empresa que administra el sector del transporte de electricidad público en Francia.

En un primer momento, se planteó construir en altura esta línea de alta tensión, proyecto que produjo numerosas protestas de habitantes de la zona y de ecologistas, antes de que los gobiernos de los dos países decidieran en 2008 que la línea sería enterrada.

"Se necesitaron tres años de obras y 700 millones de euros de inversión para realizar esta conexión de todos los récords", recordó Maillard, que asistió al acto junto con su homólogo español, José Folgado Blanco, presidente de Red Eléctrica de España.

La línea, parcialmente financiada por la Unión Europea, tiene 64 Km de longitud entre Baixas (departamento francés de Pirineos Orientales) y Santa Llogaia, en la provincia de Gerona. Sobrepasa ampliamente a la que hasta ahora era la más larga, la de Tokio, de 40 Km.

Además del túnel central de 8,5 km cavado en los Pirineos, tiene segmentos cubiertos a los dos lados de la frontera, y estaciones de conversión en las dos extremidades.

Proveerá una potencia de 2.000 megawatts de corriente continua con la tecnología VSC y permitirá multiplicar por dos la capacidad de la interconexión franco-española, llevándola a  2.800 MW. La tecnología denominada VSC permite una inversión en 50 milésimas de segundo de los flujos de corriente.

Ensayos están siendo realizados ya para la línea de muy alta tensión, que será plenamente operativa en junio próximo.

Ésta es la quinta línea de interconexión entre Francia y España, y la primera que se ha construido desde hace más de 30 años.

El presidente francés, François Hollande, y el primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho, se reunirán con Rajoy en Madrid el mes próximo en una cumbre consagrada a las interconexiones energéticas entre los tres países.

Tras la ceremonia, Rajoy , Valls y Miguel Arias Cañete, comisario europeo de Energía, también presente, se trasladaron al castillo de Peralada, cerca de Figueras, para participar en una reunión y un almuerzo al que asistirá también el presidente catalán, Artur Mas. 

Éste, que organizó el 9 de noviembre un referéndum no ofical sobre la indpendencia catalana, pese a la oposición de Madrid y a que fue declarado no conforme a la Constitución, no se había reunido con Rajoy desde el 30 de julio.

Valls se trasladará después a Argeles para participar a una ceremonia ante el monumento de la Retirada. "Estoy contento de participar en estas ceremonias importantes sobre la Retirada, el exilio" de los republicanos tras la guerra civil española, dijo.