El museo más grande del mundo será vecino de las Pirámides de Giza
Los grandes tesoros de Egipto, incluidos miles de ellos que nunca se han exhibido, podrán ser vistos a partir del próximo año cuando se inaugure el Gran Museo Egipcio, en Giza, que se convertirá en el más grande del mundo.
Concebido en 2010 por el despacho irlandés Heneghan Peng Architects, que encabeza Shih-Fu Peng, el nuevo Gran Museo de El Cairo se construye en una superficie de 224,000 metros cuadrados.
La presente es una de las pocas obras públicas de Egipto que ha sido sometida a concurso internacional y resultó elegida entre más de 1,500 proyectos procedentes de 83 países.
Inaugurado en 1902, el Museo de El Cairo ha sido el centro histórico de exhibición de la cultura egipcia y de sus de faraones. Sin embargo, hace muchos años quedó rebasado.
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De una joya arquitectónica a un recinto descomunal
La sobresaturación hizo cada vez más urgente la necesidad de contar con un nuevo espacio ante la imposibilidad de expandir el actual museo, ubicado en la famosa Plaza Tahrir, considerado una joya arquitectónica que data de principios del siglo XX.
El recinto se creó con la intención de albergar 12,000 objetos, pero hoy en día posee una colección que supera los 150,000, lo que ha obligado a almacenar miles de piezas y exhibirlas en desorden, como si fuera un oscuro almacén.
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Desde hace una década, el gobierno decidió levantar una nueva instalación, un proyecto que lo convertirá en el museo más grande del mundo, cerca de las pirámides de Giza.
El complejo está ubicado en el borde de la primera meseta del desierto, justo entre las pirámides de Egipto y la ciudad, a 50 metros sobre el nivel del río Nilo.
A tan solo dos kilómetros están, totalmente visibles desde el sitio, las pirámides. El concepto del recinto es la unión del actual y el antigúo Egipto.
El museo emerge en una estructura tridimensional inscrita por un conjunto de ejes visuales desde el sitio hasta las pirámides. En ese sentido, los muros de los edificios norte y sur están alineados con ellas.
La fachada principal del recinto será inconfundible por su muro traslúcido de alabastro.
El acercamiento al edificio es una serie de capas, por las que el visitante se mueve a través de un patio monumental, una entrada sombreada y una gran escalera que asciende al nivel de la meseta. Es allí donde se encuentran las galerías y por donde el visitante ve por primera vez durante su recorrido las pirámides.
Las revueltas y la llamada 'Revolución Árabe' que se produjo en Egipto en 2011, aumentaron los costos de la construcción a cerca de 1,000 millones de euros (1,118 millones de dólares), desde los 550 millones de euros iniciales, y retrasaron su construcción.
En 2013 comenzaronn los trabajos y la empresa egipcia Orascom Construction se adjudicó el contrato para la tercera fase de la magna obra que será un escaparate para unos 100,000 artículos del antiguo Egipto.
Las autoridades egipcias esperan recibir en el nuevo museo unos 5 millones de visitantes al año, con un promedio diario de 10,000 personas.
Son tantos los tesoros que tiene Egipto que tras la apertura del megaproyecto, el actual museo de El Cairo continuará exhibiendo la majestuosidad que alcanzó la civilización egipcia.
