Colectivo #Epicentro propone decálogo para una reconstrucción social
El colectivo #Epicentro, fundado por más de 30 organizaciones civiles, empresariales y académicas para vigilar la reconstrucción tras los sismos de septiembre pasado, propuso 10 medidas para propiciar una obra con enfoque de derechos humanos en las zonas afectadas.
De acuerdo con un comunicado emitido por la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), que pertenece al colectivo, es importante en este momento sentar las bases para una reconstrucción con perspectiva social, que sea resiliente, participativa, incluyente, equitativa, sostenible y efectiva.
Además deben aplicarse criterios de accesibilidad y diseño universal, que contribuya a revertir las desigualdades sociales.
"La reconstrucción debe poner la dignidad y autonomía de las personas y comunidades afectadas en el centro del proceso y adoptar un enfoque de derechos humanos –con perspectiva de género, infancia, juventudes y discapacidad –que no discrimine ni revictimice a nadie", apunta el comunicado de Coparmex.
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Las 10 medidas
1. Abrir y hacer públicos los censos de daños y afectaciones en formato de datos abiertos, tanto de edificaciones e infraestructura como servicios; de las poblaciones afectadas, daminificadas y de los folios otorgados. Todos estos datos deben georreferenciarse, estar actualizados y desagregados por entidad, municipio, localidad, sexo, edad, etnicidad y discapacidad.
2. Usar y abrir el estándar de datos abiertos en la metodología, reglas de operación, lineamientos, en una plataforma consolidada, de las variables para la focalización y distribución de los recursos –en dinero y especie– para la reconstrucción, así como los criterios de elegibilidad y requisitos para acceder a los mismos.
3. Centrar la reconstrucción en las características de las personas, las necesidades particulares de grupos sociales, el tipo de localidad y su ecosistema local.
OPINIÓN: Planear para construir mejor y dejar de vivir en la inmediatez
4. Involucrar a las poblaciones afectadas en el diseño de las edificaciones, la infraestructura y los servicios que serán reconstruidos; así como asegurar su
participación activa, directa, sustantiva y plena en todo el proceso de reconstrucción.
5. Dejar de destruir y conservar los elementos del entorno físico que se puedan recuperar en vez de demolerlos (viviendas, edificios, infraestructura, etcétera). Crear bancos de materiales, reutilizar materiales obtenidos tras los derrumbes y/o demoliciones y gestionar adecuadamente aquellos imposibles de reutilizar. Garantizar recursos económicos suficientes para cubrir la asistencia técnica tanto para la mejora como para la construcción de nuevas viviendas.
6. Promover la producción social de la vivienda y el hábitat respetando las formas, estilos de vida, arquitectura, vocación productiva y las cosmovisiones de las personas y comunidades afectadas; y utilizando materiales y sistemas constructivos locales y tradicionales.
7. Incorporar el diseño universal y la accesibilidad de toda construcción emprendida en la reconstrucción (conforme a las definiciones contenidas en la Ley General de Inclusión de las Personas con Discapacidad así como la Norma Técnica Complementaria para el Proyecto Arquitectónico del Reglamento de Construcciones 2011, CDMX).
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8. Reducir riesgos preexistentes , aprender de los errores, fortalecer capacidades locales y no generar nuevos riesgos que incrementan la probabilidad de que los fenómenos naturales se conviertan en desastres.
9. Establecer medios para la recepción, sistematización, canalización y resolución de quejas, denuncias, reportes o controversias relacionadas con impactos negativos del proceso de reconstrucción. No otorgar recursos para la reconstrucción a empresas con antecedentes de violaciones o afectaciones a los derechos humanos.
10. Fortalecer la infraestructura para la provisión de servicios públicos de cuidado accesibles, aceptables y de calidad; y acompañar en el proceso de reconstrucción a las poblaciones afectadas para asegurar su máximo nivel posible de salud física y mental mismas, especialmente de personas con enfermedades crónicas y con estrés post traumático, depresión o ansiedad.