La Auditoría detecta daños por 953 mdp en contrato Pemex-Odebrecht
El contrato otorgado por Pemex a la firma brasileña Odebrecht para realizar trabajos en la refinería de Tula, Hidalgo, pudo generar daños o sobrecostos por cerca de 953 millones de pesos (mdp), estima la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
El análisis más reciente del órgano fiscalizador muestra nuevos datos sobre las posibles estimaciones de costos del contrato otorgado de manera directa en 2014 por la petrolera mexicana.
El mayor monto se refiere al análisis de 13 partidas que se compararon con un contrato similar otorgada a la firma mexicana Grupo Constructor Diamante para la refinería de Salamanca, en una licitación internacional pública abierta.
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“Son trabajos con características similares y que fueron ejecutados por una empresa mexicana adjudicada mediante licitación pública internacional y aprobado por la Gerencia de Proyectos 2 de Pemex Refinación en el mismo año, mismo que ofreció precios más convenientes para el estado en partidas similares, con lo que se comprobó que la propuesta de la contratista extranjera no fue la más conveniente para el Estado”, apunta la ASF en su auditoría 16-6-90T9M-04-0479, publicada este martes.
La comparación entre los precios propuestos en ambos contratos arroja un probable sobrecosto de 707.6 mdp, según los cálculos de la Auditoría. Pemex defendió que los trabajos no pueden compararse derivado de que se tratan de condiciones distintas tanto de suelo como de clima.
“Aun cuando las condiciones del sitio y climatológicas son diferentes, no justifican como es que un mismo concepto varíe en precio en más del 60% y hasta el 300% por arriba de los precios contratados con otra empresa que realiza trabajos similares”, revira el órgano en su análisis.
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La ASF agrega otros siete posibles casos de sobrecosto en el contrato PXP-OP-SILN-SPR-CPMAC-A-4-14 adjudicado por Pemex en 2014, que entre todos suman 953 mdp. El contrato original iba a tener un costo de 1,436 mdp, pero luego de su adjudicación directa, se elevó hasta los 2,315 mdp.
La auditoría agrega que a la fecha de revisión, agosto de 2017, no se había realizado el acta de extinción de derechos y obligaciones del contrato; a pesar de que Pemex había dado por terminado el contrato en julio de este año. La petrolera sólo ha admitido irregularidades por cerca de 119 mdp en este contrato.
La firma brasileña se encuentra en escrutinio desde finales del año pasado derivado de la admisión de una larga cadena de sobornos a lo largo de América Latina, que incluye un pago por 10.5 millones de dólares (mdd) a funcionarios públicos en México, en una investigación que ha envuelto al ex director de Pemex Emilio Lozoya, señalamientos que el ex funcionario ha negado.
