La construcción retomará el crecimiento en 2018 pese a incertidumbre
Luego de un cierre negativo en 2017, la industria mexicana de la construcción volverá a crecer en 2018 a pesar de que la incertidumbre por la inflación, las tasas de interés y el TLCAN seguirá presente en el panorama y a que a estos factores se suma la elección presidencial.
De acuerdo con estimaciones del Centro de Estudios Económicos del Sector Construcción (Ceesco), la construcción se contrajo entre 1.5 y 2.0% anual en 2017, un año caracterizado por la incertidumbre, la cual seguirá imperando.
No obstante, en 2018 la industria superará el desempeño negativo anterior y registrará un "ligero crecimento" de entre 0.3% y 1%, según el análisis del Centro.
Los componentes que impulsarán esta leve expansión, según el Ceesco, son la inversión física presupuestaria, que este año tendrá un crecimento real de 4.7% anual, lo que "indica una distensión en la expansión del gasto público".
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Además se verá un dinamismo en la construcción inmobiliaria residencial para estratos medios y altos, crecerá la infraestructura turística, comercial y de servicios, y continuará la etapa de reconstrucción luego de los sismos de septiembre pasado.
En materia de empleo, se prevé que el sector generará entre 20,000 y 60,000 puestos de trabajo.
En cuanto a las Asociaciones Público-Privadas (APP's), el Ceesco las considera como el vehículo ideal para complementar y en un largo plazo sustituir la carencia de recursos fiscales. Pero advierte que para será a largo plazo cuando las inversiones bajo este esquema sean significativas.
En ese sentido, en 2018 los montos contemplados para APP's representan solo 3% del monto total propuesto para inversión física este año. El Presupuesto de Egresos de la Federación en Inversión Física incluye 21 proyectos en esta modalidad.
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6 piedras en el zapato de la construcción
Pese a que se espera un mejor desempeño del sector, éstos serán los factores que obstaculizarán un mayor avance:
1. Encarecimiento de los insumos por la inestabilidad en el tipo de cambio peso-dólar.
2. Posibles alzas en las tasas de interés que inhiben el crédito y encarecen los proyectos.
3. Los resultados del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que podría frenar las exportaciones de las que depende México y que impactarían en la inversión en edifiación industrial, comercial y de servicios.
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4. Una posible mayor reducción de los precios del petróleo o de la plataforma de producción petrolera.
5. Una posible contracción de la inversión privada ante la incertidumbre por la implementación de la Reforma Fiscal en Estados Unidos, lo que traería como consecuencia un posible recorte del Presupuesto de Egresos para la inversión pública en infraestructura.
6. Los resultados de las elecciones presidenciales del 1 de julio, donde el Ceesco ve posibilidades de que se opte por la continuidad ante "un panorama tan incierto".