El Gobierno de la Ciudad de México pidió a las instituciones del Estado y a los bancos analizar la posibilidad de suspender, de manera extraordinaria, sin cobro de intereses, los pagos de las mensualidades de los créditos hipotecarios a personas afectadas por el sismo del 19 de septiembre de 2017, hasta que concluyan la reconstrucción o la rehabilitación de sus hogares.
José Ramón Amieva, jefe de Gobierno, hizo la solicitud mediante oficios al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Fovissste), al Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) y a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Los habitantes de viviendas en condominio fueron de los más afectados, en algunos casos los inmuebles fueron dictaminados como inhabitables por alto o medio riesgo estructural, y de acuerdo con Amieva muchas de estas casas fueron adquiridas a través de créditos hipotecarios.
El mandatario capitalino explicó que esta medida sería aplicada hasta que se resuelva la condición de vulnerabilidad que enfrentan los damnificados, lo que les impide continuar con sus pagos.
Precisó que los damnificados han expresado su gran preocupación por las complicaciones para continuar con los pagos de sus créditos hipotecarios, que en muchos casos aún no han sido saldados y al mismo tiempo tienen que pagar la renta de otro inmueble.
La suspensión no contempla el pago de seguros, a efecto de garantizar el beneficio que en su caso otorgan las aseguradoras.
Pide a la Asamblea redirigir recursos
El 11 de junio el gobierno capitalino envió una iniciativa a la Asamblea Legislativa para solicitar el redireccionamiento de recursos a la reconstrucción.
La iniciativa busca reformar y adicionar diversas disposiciones del Decreto de Presupuesto de Egresos de la ciudad para 2018 con el objetivo de destinar 698 millones 879,254 pesos al fideicomiso público que fue aprobado la semana pasada por la Comisión para la Reconstrucción, a través del cual se dará apoyo económico directo a personas de escasos recursos o en situación de vulnerabilidad para que puedan rehabilitar o reconstruir sus viviendas.