La Procuraduría CDMX revela peritaje de Artz Pedregal; alista citatorios
El peritaje de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México (PGJCDMX) sobre el derrumbe registrado el pasado 12 de julio en el centro comercial Artz Pedregal, concluyó que hubo deficiencias en el cálculo de cargas del cantilever o volado que se colapsó.
La Procuraduría evaluará la responsabilidad por el siniestro, por lo que ahora la fiscalía procederá a citar a las partes involucradas para que puedan "manifestar lo que a su derecho convenga, dentro del margen del nuevo sistema acusatorio", dijo José Antonio Escobar Plata, fiscal desconcetrado de Investigación en Álvaro Obregón.
Los responsables podrían ser sancionados hasta con seis años y medio de prisión, de acuerdo con el funcionario.
El peritaje determinó que hubo las cargas en el cantilever fueron deficientemente calculadas.
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La construcción no sobrepasó las áreas autorizadas, "pero lo que se detecta es que hay una deficiencia al considerar esas cargas. No es que no estuviera diseñado como para esa situación, sino que no las contemplaron (las cargas) adecuadamente en su momento. Por ello es que quedó falta la estructura de refuerzo", explicó Amado Bernabé Torres Godínez, perito en arquitectura de la PGJCDMX.
"La sección tendría que haber sido una mayor sección tanto en el anclaje como en la viga mismia; sin embargo, si metes al sistema y programas con las cargas que tú estimaste, te va a dar la sección" que se derrumbó, pues sus valores quedaron por debajo de lo correcto.
El cantilever aún estaba en obra, de acuerdo con el perito. En la parte superior se estaba habilitando para un restaurante y aún se estaban haciendo trabajos de acabados, falsos plafones, muros de tablaroca.
En el siniestro ocurrido el 12 de julio pasado no se registraron heridos ni fallecidos.
El centro comercial es un desarrollo de Grupo Sordo Madaleno y fue inaugurado el 8 de marzo pasado.
Sordo Madaleno estuvo a cargo de buena parte de las obras del proyecto, desde el diseño arquitectónico, dirección del proyecto y coordinación de ingenierías. No obstante, trabajó con empresas especializadas para desarrollar la ingeniería estructural, eléctrica, hidrosanitaria e incluso para muros verdes.
A fines de julio, el grupo dio a conocer los peritajes independientes realizados por el Instituto de Ingeniería de la UNAM, la firma estadounidense Wiss Janney & Elstner (WJE) y la empresa Stark + Ortiz, contradas por la misma empresa.
Los tres análisis concluyen también que el volado cayó por un error de cálculo estructural.
De acuerdo con la firma desarrolladora, la empresa Vargas de la Rosa quedó a cargo de realizar ese cálculo.
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En total se vio afectada un área de 1,150 metros cuadrados en tres secciones, pues el cantilever ocupaba un solo nivel, que abarcaba el entrepiso del segundo nivel y el entrepiso de la terraza. Al colapsar, cayó sobre el local de la planta baja, que también estaba siendo habilitado.
El primer nivel puede ser restituido, pero el volado no, aclaro Bernabé Torres Godínez.
Informó además que en el área del derrumbe se están llevando a cabo trabajos de mititgación de riesgos y reforzamiento, por las deformaciones registradas en partes del inmueble debido al colapso, supervisado por el Instiuto de las Construcciones.
Aclaró que otro volado similar, con vista al Périférico, el mismo Instituto recomendó colocar puntales adicionales "como adiciones a la estructura, y esos ya no se van a retirar, ya van tener que ser parte del nuevo proyecto". Estos trabajos ya se concretaron.
