El sector constructor estima menor crecimiento si se cancela Texcoco
De cancelarse la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) se impactaría la credibilidad del país y el crecimiento de la industria de la construcción en 2018, que podría expandise solo 1.0% anual o menos, cuando se espera un desempeño de entre 1.5 y 2.0 por ciento.
Eduardo Ramírez Leal, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), indicó esto y agregó que "los constructores vemos un foco medio amarillo de precaución que puede desatar que los inversionistas retiren la opción de invertir en construcción".
En este sentido, aseguró que existe intranquilidad en los constructores que piensan que pueden correr riesgos en adelante cada vez que participen en una licitación, así como afectaciones en cadena para otros proyectos de infraestructura.
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"Pediría que lo analicen, que vean la repercusión que va a tener en la credibilidad, certidumbre, Estado de Derecho, en todo para los inversionistas, todos somos importantes", dijo.
En entrevista en el marco del 35 Aniversario del Instituto Tecnológico de la Construcción (ITC), Ramírez Leal comentó que la cancelación de este proyecto aeroportuario podría generar un problema grave en la generación de empleo.
De igual manera, expuso que nunca hubo una comparación total entre el proyecto donde se construye el NAIM y el proyecto de la base militar de Santa Lucía, y pese a haberse entregado al próximo gobierno documentos que avalan que Texcoco es la mejor opción, no fue suficiente.
"Nosotros decimos que todo mundo vote; hay un tema técnico, financiero, de oportunidad. Nuestro país requiere crecimiento y de infraestructura de calidad para mejores servicios. A todos nos va a beneficiar", manifestó el líder de los constructores.
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Jaguar Ingenieros esperan que Texcoco siga
Moisés Zecua Muñoz, director general de Jaguar Ingenieros Constructores, empresa que edifica la Torre de Control del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), dijo que la consulta sobre el futuro de esta obra genera incertidumbre, aunque confían que el resultado sea positivo para el proyecto de Texcoco.
"El aeropuerto tiene muchos años de estudio, y sin duda consideramos que es la mejor opción para este país. Confiamos en nuestro próximo gobierno", afirmó en entrevista durante el 35 Aniversario del Instituto Tecnológico de la Construcción (ITC).
Pese al escenario actual sobre la continuación del nuevo aeropuerto, aún no han evaluado la posibilidad de ampararse, lo cual, podría suceder tras conocer el resultado de la consulta que se llevará a cabo del 25 al 28 de octubre próximos, mencionó.
Jaguar Ingenieros Constructores ganó la licitación para construir la Torre de Control junto con Construcciones Aldesem y Aldesa Construcciones. El monto del contrato es cercano a los 1,500 millones de pesos, de los cuales, ya se han ejercido 35%, además de lo invertido en pedidos de equipos especiales y materiales tanto nacionales como internacionales.
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Actualmente la Torre tiene un avance de 30% y de continuar el nuevo aeropuerto, se terminaría a finales del próximo año.
Sobre la posibilidad de utilizar más materiales nacionales para bajar costos, Moisés Zecua Muñoz, dijo que esta opción es factible siempre y cuando exista una justificación técnica.
La Torre de Control es el centro de procedimientos fundamentales para el funcionamiento del Nuevo Aeropuerto, ya que alojará los servicios operacionales y de navegación; además de llevar a cabo el pronóstico y observación meteorológica, la supervisión de plataformas y la asignación de aparcamiento de las aeronaves.
Esta construcción tendrá una altura de 90 metros, se ubicará entre las pistas 2 y 3, al norte del Edificio Terminal y consta de dos edificios: el Edificio Base de Soporte, que será rectangular en la base de toda la Torre; y la Torre de Control, que será de forma concéntrica y de geometría monolítica.
En conjunto, esta infraestructura se compone del edificio base para el acceso principal y áreas de soporte, el edificio base para oficinas; un área llamada de amortiguadores, un nivel donde se ubican los equipos mecánicos, otro para los equipos eléctricos, uno más para los servidores y en la parte superior, tres cabinas: la de control de plataforma; la de soporte y la de control de tráfico aéreo.