Al ser una zona sísmica, y tras el terremoto del 19 de septiembre de 1985, en la Ciudad de México, se estableció un nuevo reglamento de construcción que incluyen normas antisísmicas con la finalidad de que colapsen y causen severos daños.
Desde el 2004, la CDMX cuenta con un Reglamento de Construcción en donde se toman en cuenta las diferentes problemáticas, tanto del suelo, como de los distintos desastres naturales que pueden afectarla, principalmente sismos.
Los nuevos estándares contemplan tecnologías de ingeniería sísmica, uso de amortiguadores hidráulicos, sistemas de contrapeso y profundos niveles de cimentación, lo que en conjunto les permitiría quedar en pie ante un sismo superior a los 8.5 grados.
A continuación te presentamos algunos edificios emblemáticos en la CDMX que se construyeron bajo los nuevos estándares.
Esta edificación tiene 31 pisos en un área de 41,000 metros cuadrados y se eleva a una altura de 125,8 metros.
El diseño corrió a cargo del arquitecto mexicano Teodoro González de León. Reforma 222 cuenta con 50 amortiguadores sísmicos a lo largo de la estructura y 78 pilotes de acero a una profundidad de 50 metros, por lo que puede resistir sismos de altas magnitudes.
Este edificio es considerado de los más seguros no solo en México, sino en Latinoamérica. Se construyó entre los años 1999 y 2003 sobre Avenida Paseo de la reforma 505.
La Torre Mayor, diseñada por el arquitecto Zeidler Roberts Partnershio, cuenta con la infraestructura para soportar un sismo de 8.5 grados.
Cuenta con 55 pisos con una altura de 225 metros, y los 98 amortiguadores le permiten reducir el esfuerzo estructural ante un eventual terremoto.
La Torre fue construida con una base de 252 pilares de hormigón de 60 metros de profundidad, con el fin de asentarlo en el terreno más firme, debido a que esta zona de la CDMX es considerada como lacustre.
Fue construída entre 1992 y 1996, el diseño corrió a cargo de Teodoro González de León, Francisco Serrano y Carlos Tejada.
Se ubica en Paseo de Tamarindos 440. Tiene una altura de 161 metros y está conformada por dos torres de 31 y 34 pisos. El meterial es clave en esta construcción, ya que se utilizó una mezcla de concreto reforzado, cristal templado y aluminio.
Se le considera como uno de los edificios inteligentes de México, por sus sistema Bilding Managment System (BMS), sistema de monitoreo para evaluar las condiciones de seguridad.
Es uno de las construcciones más seguros ubicados en la CDMX ya que superó los requisitos más estrictos en materia de sismos que estipula el Reglamento de Construcciones.
Las pilas alcanzan los 51 metros de profundidad, llegando hasta la segunda capa del subsuelo, cuando regularmente, las construcciones se apoyan en 33 metros de profundidad, en la primer capa dura.
Lo anterior, generó controversias del edificio inaugurado en 2011 y cuyo costo superó los 4 mil millones de pesos.
Esta construcción fue diseñada por pedro Moctezuma Díaz Infante en 1976. La Torre de Pemex cuenta con 214 metros de altura, y resiste sismos de 8.5 grados.
Está ubicado en la colonia Verónica Anzures, sobre Avenida Marina Nacional #329, colonia Petróleos Mexicanos, alcaldía Miguel Hidalgo.
Cuenta con 164 pilotes de concreto y acero que penetran a una profundidad de 32 metros, se encuentra reforzada con 39 mil 150 metros cúbicos de concreto, 224 mil toneladas de acero estructural y 90 amortiguadores sísmicos.
Un edificio que es emblemático en la CDMX es la Torre Latinoamericana, y aunque se construcción se remonta a 1956, no ha colapsado en los terremotos de 1985 y 2017, por ejemplo.
Los tres pisos de sótano, sirven como cimientos y como cajones hidraúlicos. Cuenta con 361 pilotes de concreto que lo sostienen, y su capa más resistente se encuentra a 34 metros de profundidad.
