1 LIGHTEAM Domador de luz
La conversión de la luz en ‘estructura’ y la concepción de la sustentabilidad no sólo en unidades numéricas de ahorro, sino en dimensiones ergonómicas y calidad de vida espacial dentro de la Universidad de Arte (UNARTE), en Puebla, colocaron a Lighteam en el número uno del ranking de los 10 Despachos más innovadores.
El edificio de UNARTE ostenta hoy la certificación LEED Platino con la obtención de más de 80 punto de un total de 110, gracias a la aplicación de diversas tecnologías de corte pasivo, es decir que no requieren ni de controles ni de motores. Y así se convierte en la primera escuela en recibir esta certificación en América Latina, y en el quinto inmueble con tal distinción en México.
RANKING 2015: Finalistas Diez Despachos
En la construcción de 550 m2, diseñada por José Ramón Tagle, Lighteam intervino tomando como eje rector al sol.
Gustavo Avilés explica que el diseño de UNARTE sigue un principio de origami, esto es, una serie de capas con las que se controlan varios elementos, entre los que destaca la iluminación natural.
La luz de día se introduce mediante una rejilla electroforjada que permite que llegue al piso inferior, al tiempo que funciona como una vía de aire para la ventilación natural.
Para distribuir la luz de día al interior, Lighteam recurrió a ‘tubos solares’, dispuestos verticalmente a través del pasillo, los que succionan la luz natural y logran una inyección de ésta a espacios donde no la hay, como son los sótanos, así generan iluminación que permite una visibilidad natural. Todo, a través de lo que Gustavo Avilés definió como la “domesticación de la luz natural”.
El edificio también cuenta con un celestorio orientado hacia el norte que realiza succión de luz y la transmite a diversas zonas del edificio.
La construcción de la UNARTE está separada
a un metro de su colindancia para lograr un ducto que sirve como inyector no sólo de luz, sino de aire y registro de instalaciones.
Cortesía LIGHTEAM
Todos los elementos anteriores hacen que el edificio sea completamente autosuficiente en materia de energía, pues la luz que se absorbe en el día también genera energía eléctrica a través de paneles fotovoltaicos instalados en la cubierta de ‘dientes de sierra’, y se toma de la red para ocuparse por la noche a través de un medidor reversible.
El resultado generado en este proyecto está basado en la filosofía de Lighteam, que de acuerdo con el arquitcto Avilés, consiste en llevar un proceso basado en el análisis a través de su “diagnóstico total inicial”, lo que genera soluciones más sencillas y eficientes, pues ese análisis se transforma en un pensamiento que conjunta la participación de especialistas de diversas disciplinas.
“Creo que este proyecto es un extraordinario ejemplo de lo que es pensar en conjunto, es bueno por la participación transdisciplinaria (sic) transversal de todos los especialistas. Las contribuciones del aire, con la acústica, con la luz, con la térmica, en el sentido de protección al caminar, al circular, con la cuestión de la vegetación en el entorno; todo eso genera un sólo resultado”, expresa.
La realización de este proyecto tuvo un costo de 4.5 millones de pesos, y de acuerdo con Avilés, aquí se entiende la sostenibilidad como un principio orgánico que además logra elementos de seguridad y accesibilidad (a través de rampas y elevadores), creando un concepto integral que es percibido por las personas que disfrutan del inmueble.