(Expansión) - Imagina que rentas un departamento que de por sí te cuesta bastante juntar para la renta. Ahora imagina que, de la noche a la mañana, tu casera te dice que las reglas han cambiado y la forma en que estableció estas nuevas normas van en contra de tus derechos.
Pues algo así está ocurriendo con quienes vivimos en CDMX.
Déjame ponerte en contexto. Hay dos documentos que están en etapa de consulta pública para conocer la opinión de los ciudadanos sobre estos. Me refiero al Plan General de Desarrollo y el Programa General de Ordenamiento Territorial de la Ciudad de México.
Tuve oportunidad de estar en una charla informativa que impartió Josefina Mac Gregor, representante de Suma Urbana, asociación que nace a partir del trabajo en campo de la sociedad civil en temas de desarrollo urbano y lucha contra la corrupción.
Te comparto algunas ideas que me llamaron la atención. Lo primero es que la presentación simultánea de estos documentos a consulta pública es ilegal porque la Constitución indica que primero se tiene que establecer el Plan General de Desarrollo (PGD) y posteriormente el Programa General de Ordenamiento Territorial (PGOT), ya que este debe derivar de las directrices establecidas y publicadas en el primer documento.
Tiene lógica porque el PGD representa cómo va a crecer la ciudad hacia el futuro y dentro de este plan general posteriormente debería estructurarse “el cómo” con el PGOT, que establece normas tan importantes como el uso de suelo, qué se puede construir, dónde se puede construir, qué va a ser área verde en un futuro, cuántos pisos pueden tener los edificios, dónde se pueden poner negocios etc.
¿Dónde se está violando nuestro derecho? No puede presentarse a consulta un PGOT sin antes contar con un PGD porque se está violando el derecho a una buena administración pública.
Otra violación es que la Constitución establece que de manera forzosa la ciudadanía tendría que haber participado en la elaboración de estos documentos, pero no fue así. Un día, quienes vivimos en esta ciudad nos levantamos y nos enteramos de que los documentos ya estaban elaborados.
El hecho de que estos no se hicieran conforme a lo que determina la Constitución viola nuestro derecho a una ciudad habitable y a la participación ciudadana… y es motivo suficiente por el cual debería de haberse cancelado la consulta.
¿Por qué es preocupante que nos hayan excluido? Parte de la gravedad de la existencia PGOT es que suple los programas que ya existen. En otras palabras, anula los Programas de Ordenamiento Territorial de las Alcaldías y los Programas de Pueblos y Barrios Originarios. Y si tu colonia cuenta con un Programa Parcial de Desarrollo Urbano, es decir, con un plan con un carácter especial adaptado a las condiciones particulares de tu zona, también lo anula. El PGOT afectará al 100% del suelo de la ciudad.
Lo primero que hace el PGOT es crear algo denominado Áreas de Gestión Territorial (AGT’s). Existen 13 tipos distintos de AGT’s y lo más probable es que tu colonia no solo entre en una de estas categorías sino en varias. En todas ellas el propósito del programa es construir más y diferente.
En relación a cómo se va a construir y se hará la densificación dependerá de las nuevas Normas Generales de Ordenación Territorial (NGOT). Nuevamente no importa cuáles son las condiciones generales de tu predio y tu colonia porque estas normas aplicarán para todos en la CDMX. Son 36 en total.
Estos documentos definirán el rumbo de nuestra CDMX por los próximos 20 años. Con ellos quedará en manos de la autoridad la decisión de qué se va a poder abrir, dónde poder abrirlo, lo que se puede construir y qué nivel de densidad sin importar nuestros Programas Parciales, de Alcaldías y de Pueblos y Barrios Originarios. Esto va a incidir en la vida diaria de todas las personas que habitamos esta ciudad.
La aprobación de los documentos con todas estas fallas y lagunas legales podría implicar muchas cosas: el incremento de predial, la falta de agua, drenaje y la dificultad en la movilidad.
¿Qué hacer? Acércate a las personas que integran las Comisiones de Participación Comunitaria de tu Unidad territorial. Son vecinos/as de tu colonia que seguramente están enterados de cómo este programa afecta particularmente a tu zona y cómo puedes apoyar. Si no sabes quiénes son puedes encontrarlas aquí .
También sugiero sigas a Josefina Mac Gregor (@JosefinaMacG en twitter). Ella recomienda no participar en la consulta que organizó el Instituto porque es como avalar que su consulta es válida y no es así.
Infórmate y toma postura antes de que la consulta avance porque vamos contra reloj.
Nota del editor: Adriana Castro tiene una especialidad en Psicología de la Creatividad por la Universidad Autónoma de Barcelona. Es fundadora de Call to Action: Empresas felices. Síguela en LinkedIn , Facebook y/o Instagram . Las opiniones en esta columna pertenecen exclusivamente a la autora.
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