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El nuevo rostro del barrio San Miguel, Iztapalapa

FOTOGALERÍA: El proyecto surgió hace dos años, cuando la delegación contactó al despacho Bandada! Studio para hacer un proyecto similar al de Medellín y Barcelona, donde transformaron barrios con altos valores de marginalidad y delincuencia.
lun 28 abril 2014 05:02 PM
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El despacho Bandada! Studio trabaja en la segunda fase del proyecto 'Rehabilitación de la Imagen urbana del Barrio de San Miguel', en la delegación Iztapalapa de la Ciudad de México, que consiste en reformar calles, el mercado y la guardería local con una inversión de aproximadamente 100 millones de pesos (mdp).

El proyecto consta de tres etapas, la primera fue la transformación de la avenida Hidalgo, la articulación principal de la zona, que finalizó hace un mes con una inversión de 23 mdp.

La tercera se trata de un masterplan para continuar las siguientes fases que alguien más desarrollará. En total, el proyecto tendrá un inversión estimada de 175 mdp.

Bandada! Studio es una oficina formada por jóvenes arquitectos bajo la dirección de Iván Valero y que opera internacionalmente desde Barcelona y México. El equipo de trabajo lo conforman Guillem Villanueva Nolla, el mexicano Carlos Nuñéz y el italiano Matía Branvila.

El proyecto surgió hace dos años, en el verano de 2012, cuando la delegación contactó al despacho para hacer un proyecto similar al que ya habían realizado en Medellín y en Barcelona, donde también transformaron barrios con condiciones similares a las de Iztapalapa: con altos valores de marginalidad, delincuencia y sobre todo, una alta percepción de inseguridad del resto de la ciudad.

"El reto fue lograr una transformación social y hacer que pueda mejorar la economía en barrios donde las condiciones laborales son muy precarias, donde prácticamente todo es ambulantaje”, dijo Iván Valero, socio de Bandada! Studio y director del proyecto en entrevista con Obras. 

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“Nosotros somos arquitectos jóvenes y nos gusta trabajar para hacer urbanismo social, siempre que intentamos trabajar con gobiernos para hacer cosas mejores para la gente y esta es una oportunidad inmensa de un gobierno que realmente creía en la capacidad de transformar, le aposto fuerte y confió en nosotros y estamos contentísimos”, agrega Valero.

Primera fase: la avenida Hidalgo

Después de consensuarlo con el equipo del Plan Director y con la Delegación, Bandada! Studio decidió que el proyecto debería abrir la etapa de intervenciones con esta importante avenida, situada frente al mercado, que sirve de acceso al deportivo y que cruza transversalmente el eje Metro-Universidad. 

“Fueron 10,000 m2 de espacio público, el espacio era relativamente pequeño. Había mucho escepticismo sobre lo que se iba a hacer y el dinero que se iba a invertir, entonces, necesitábamos hacer un proyecto pequeño, fácil de construir, rápido y que la gente pudiera ver enseguida”, comenta el arquitecto en entrevista.

El despacho identificó dos problemas fundamentales: Por un lado, la innumerable cantidad de barreras arquitectónicas causadas principalmente por un camellón alto y descuidado, y a unos árboles sin el mantenimiento adecuado y que a causa del sellado del suelo, sus raíces requerían buscar humedad en las viviendas destruyendo banquetas y redes de drenaje.

Por otro, la escasa y de mala calidad de iluminación pública que no dejaba otra opción a que fuesen los establecimientos privados los que iluminaran el espacio público, y como es lógico, cada cual con su criterio.

La solución a estos problemas se resolvió con un diseño que definió la separación virtual entre vialidad y banqueta a través de la combinación de diferentes elementos de mobiliario urbano (jardineras, bolardos, bancas…) para evitar la monotonía de la repetición en una calle recta de aproximadamente 300 metros de longitud.

Además, “en las calles se utilizó un sistema de drenaje separativo en la que toda la lluvia que esté en el asfalto, esté manchada de aceite o de basura se va directamente al drenaje profundo, pero toda la que cae en las jardineras, se infiltra y tenemos una capa debajo del pavimento que distribuye el agua y poco a poco la van infiltrando al acuífero y hemos pasado de 0% de captación a un 30%”, agrega el arquitecto Iván Valero. 

Segunda fase: demoler ‘Mi Mercado’

Consiste en demoler el mercado de la delegación para construir uno nuevo.

"Vamos a corregir todas las carencias que tiene y convertirlo en un mercado de máxima calidad con toda las tecnologías propias de un mercado de primer mundo del siglo XXI, que incluyen el manejo de residuos y la reutilización de agua”, comenta el director del proyecto.

Asimismo, adaptarán el proyecto, tanto la guardería como el mercado, para que tengan todos los sellos de máxima calidad.

“Lo que estamos haciendo en todos los proyectos es que sea muy sustentable, usando métodos de ventilación e iluminación natural, que todo esté separado y que funcione eficientemente, prácticamente los proyectos no requerirán de luz eléctrica y la poca luz eléctrica que requieran se usarán las placas solares que son autosuficientes a 100%”, agregó Valero en entrevista.

El resultado: una 'belleza contagiosa'

La consecuencia directa de este proyecto es que se empezaron a dar casos de grupos que experimentaban con nuevos usos para el espacio público, o que empezaban a descubrir el placer de caminar, de jugar o de sentarse a disfrutar el acontecimiento urbano, pero también se contagiaron de la necesidad de crear belleza organizándose para pintar los muros de las escuelas con nuevos motivos, modernizar los carteles y fachadas de sus negocios o customizar las jardineras colocando sus propias plantas.

Incluso los comerciantes ambulantes, el colectivo que más fricciones encontraba en su encaje dentro del proyecto, se propusieron dar un salto de calidad y diseñaron  por iniciativa propia unos nuevos puestos homogéneos y uniformados que ellos mismos construyeron para estar en mejor consonancia con el nuevo contexto.

“Hay un proceso de negociación (con los ambulantes), se les explicó lo que iban hacer, lo entendieron bien, incluso los mismos ambulantes durante el proceso de obra montaron una especie de puestos de información por decisión suya, explicando las mejoras a los vecinos”, puntualizó Iván Valero. 

El despacho está trabajando actualmente en un proyecto de rehabilitación de un edificio en el Centro Histórico de la Ciudad de México y realizó un proyecto Alicante que consistió en una reforma al parque central y la nueva estación del tren.

Tags

Arquitectura

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