Publicidad
Publicidad

La Casa del Árbol inicia con la preocupación por el medio ambiente y el desarrollo sustentable. Se basó en aprovechar al máximo los 149 m2 de una casa ubicada en el centro histórico de Mérida, creando espacios amplios de carácter contemporáneo que se integran a la arquitectura histórica precedente.

Tres premisas fueron evidentes para realizar el proyecto la permanencia de un centenario árbol de Zapote, la necesidad de  mayor apertura en  el espacio y causar el menor impacto al contexto natural y edificado. Se optimizo el espacio reutilizando toda la estructura existente,  reordenando  las áreas y creando aperturas capaces de incorporar ventilación e Iluminación natural favorables para cada espacio de la casa.

La casa del árbol en su totalidad, gracias a muros corredizos de cristal, puede interpretarse como una terraza donde los límites entre interior y exterior se vuelven difusos o prácticamente inexistentes, cualidad que es válida tanto para áreas sociales como privadas.

Tags

Arquitectura

Publicidad

Publicidad