Los arquitectos de la firma RCR reciben el Pritzker 2017 en Tokio
En una ceremonia presidida por el emperador japonés Akihito, los españoles Rafael Aranda, Carme Pigem y Ramón Vilalta, responsables del estudio RCR, recibieron el sábado en Tokio el Premio Pritzker, considerado el 'Nobel de la arquitectura'.
El acto, que concentró a grandes nombres de la arquitectura mundial y que se entrega en Japón por segunda vez en los casi 40 años de historia del galardón, tuvo lugar en el Palacio de Akasaka, un edificio de estilo neobarroco, construido a principios del siglo XX.
El emperador Akihito (que había cancelado sus actividades los días anteriores por motivos de salud) y la emperatriz Michiko presidieron el evento con el que Aranda, Pigem y Vilalta entraron a formar parte de los grandes nombres de la arquitectura contemporánea.
El arte de hacer sentir
Al anunciar el fallo el pasado marzo, el jurado reconoció que los tres arquitectos han conseguido desde su estudio de Olot, la provincia catalana de Girona, en el noreste español, "combinar con acierto los valores locales con una dimensión universal".
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"Emoción, felicidad, orgullo, responsabilidad y admiración por los que ganaron antes" fueron las primeras palabras del sencillo y poético discurso pronunciado en inglés por Carme Pigem, en representación de sus compañeros y ante 300 invitados.
La arquitecta definió su profesión como "el arte de materializar sueños a través de un viaje" y reveló que su aspiración en sus 30 años de carrera ha sido "hacer sentir cosas a la gente que vive en los espacios que creamos".
El estudio RCR, responsable de proyectos como el restaurante Les Cols, en Olot; el centro de arte La Cuisine, en Nègrepelisse (Francia) o la Biblioteca Sant Antoni-Joan Oliver, en Barcelona; ha logrado, según el jurado, "de la forma más poética y bella posible" que una obra pueda ser totalmente universal independientemente de dónde esté construida.
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En 1988, un año después de graduarse por la Escuela Técnica Superior de Arquitectura del Vallés, Aranda (1961), Pigem (1962) y Vilalta (1960) decidieron -en contra de las recomendaciones de todos- instalarse en Olot, una localidad de 30,000 habitantes donde han mantenido su estudio a pesar de su gran reconocimiento internacional.
"Estar en este Palacio en Japón nos trae recuerdos de cuando vinimos en nuestros comienzos a este país por primera vez. Entonces sentimos aquí el gusto por lo exquisito y el respeto por la naturaleza, algo que nos ha acompañado en toda nuestra carrera", apuntó Pigem emocionada.
Seis manos con una voz
El presidente del jurado, el arquitecto australiano Glenn Murcutt, dijo durante el acto que el trabajo de estos tres españoles confirma que "una obra arquitectónica puede ser modesta y audaz al misma tiempo" y los definió como un equipo de "seis manos y una sola voz".
Se trata de la primera vez que el Pritzker se otorga simultáneamente a tres arquitectos, y es la segunda ocasión en que se concede a un español, tras Rafael Moneo, que fue galardonado en 1996.
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En la alfombra roja de la formal ceremonia, en la que también participó el viceprimer ministro nipón, Taro Aso, se pudo ver a cinco de los seis japoneses que cuentan con el premio: Shigeru Ban, Kazuyo Sejima, Ryue Nishizawa, Toyo Ito y Tadao Ando.
Además, viajaron hasta Tokio algunos de los miembros del jurado como el británicos Richard Roger y la italiana Benedetta Tagliabue, además del arquitecto chino Wang Shu, premiado en 2012.
Al grupo de los selectos
Tom Pritzker, presidente del la fundación Hyatt que otorga el premio desde 1979, destacó que los tres arquitectos catalanes trabajan en "una colaboración profunda para conseguir belleza física y espacial al mismo tiempo que funcionalidad".
El miembro de la familia que ha dado su nombre al premio resaltó además que desde su estudio en Olot, RCR Arquitects "han conseguido mantener el balance en un mundo cada vez más global entre las necesidades locales y las ideas internacionales".
El acto se celebró en el Salón de las Flores y los Pájaros (por la decoración de sus paredes y el techo) del edificio construido en 1909 y que en la actualidad se utiliza como Palacio de Invitados extranjeros.
Allí, los tres españoles entraron a formar parte del selecto grupo que integraban hasta ahora 42 arquitectos entre los que se encuentran el británico Norman Foster, el brasileño Oscar Niemeyer, el estadounidense Frank Gehry o el holandés Rem Koolhaas.