La Pintada es una nueva población: Sedatu

El secretario de Desarrollo Agrario, Jorge Carlos Ramírez, aseguró que con la nueva La Pintada se cumple la instrucción presidencial de que lo que se reconstruyera tendría que ser mejor.

Ante el presidente Enrique Peña Nieto y habitantes de esta comunidad reunidos con motivo de la primera etapa de entrega de viviendas en esta población, destacó que “se trata de que sea una nueva población”.

El funcionario federal informó que se entregaron 125 casas nuevas con todos los servicios, a la que se le agregaron un comedor comunitario y un refugio para 100 personas.

"Las obras no se limitaron a reconstruir las 36 casas que fueron afectadas por el deslave y que vimos cubiertas totalmente de lodo”, tras el paso del huracán Manuel por esta zona, en septiembre del año pasado.

El funcionario explicó en que estas viviendas abarcan a todos aquellos que perdieron su vivienda, a los que perdieron algún ser querido y a los que estaban ubicados en zonas de riesgo.

El titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) recordó que la instrucción presidencial fue que "nada de lo que se reconstruyera iba a ser igual. Que todo lo que se reconstruyera tenía que ser mejor”.

“Entonces no podíamos simplemente volver a hacer las casas de La Pintada como eran, tenían que hacerse un lugar mejor para vivir", detalló Ramírez Marín.

Refirió que para esta labor se necesitaron 490 empleados de construcción, incluso administrativos para proveer las comidas de quienes trabajaban en la reconstrucción de La Pintada, El Edén o El Paraíso, ubicadas en el municipio de Atoyac de Álvarez.

Entre las obras edificadas también hay un comedor comunitario y refugio para 100 personas con espacios suficientes, baños para hombres y mujeres, talleres para que la gente se ocupara mientras se hacía la reconstrucción.

Ramírez Marín abundó que dichos talleres se quedaron de manera permanente, por lo que ahora La Pintada contará con servicios de tortillería, panadería y peluquería, entre otros.

De igual forma anunció que se impulsará la producción de café en la región, “donde se produce y consume uno de los mejores del mundo”, así como diversas vialidades y una cancha de futbol, entre otros espacios.

Además se terminó un parque conmemorativo al que la población ha bautizado como Parque de los Naranjos y que “generosamente decidieron que se incluyera un árbol por cada una de las (71) víctimas” (del lugar), así como otro por cada uno de los cinco policías federales que fallecieron en el rescate de la gente.

"Es un lugar diferente donde hay trabajo y hay entusiasmo", afirmó el secretario, quien añadió que la parte más importante es la estabilización de los cerros para que sea completamente seguro.

Al respecto señaló que se trabaja en un proyecto, a cargo del geógrafo José Ibarra Robles, para estabilizar los cerros en La Pintada y El Paraíso con el fin de evitar incidentes de cualquier tipo.

Ramírez Marín concluyó que ésta es una comunidad “comprometida y valiente”, además de que las obras realizadas por los propios habitantes de la comunidad restituyen la parte social y económica que tanto afectó a los pobladores.

En su oportunidad la señora Juana Castro Márquez, vecina de la comunidad La Pintada, agradeció que el presidente Peña Nieto que no los abandonara “cuando más lo necesitamos”.

“Yo sé que no lo hace cualquier persona. Usted tiene un gran corazón, un corazón lleno de bondad”, expresó la mujer, quien añadió: “le agradezco a nombre de mi gente, de todo corazón, y le pido que estas dos veces que usted ha venido que no sean las últimas dos veces que nos visite. Ahora, mi pueblo es su pueblo de usted”.

De “la casa que me van a entregar estarán siempre abiertas las puertas para usted. Lo estaremos esperando siempre con los brazos abiertos”, ofreció al mandatario federal.