Analizan problemática de la movilidad en la Ciudad de México

Uno de los retos más grandes que enfrenta la Ciudad de México en materia de transporte eficiente es definir el derecho a la movilidad, que es un elemento básico que hoy más que nunca cobra vigencia, señaló Xavier Treviño.

Al participar en la dinámica “¿Y usted, cuánto tiempo pasó atrapado en el tráfico hoy?”, el director del Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo México (ITDP, por sus siglas en inglés), subrayó que el tema del derecho a la movilidad es vago pero se encuentra en proceso de formación.

Especificó que se debe a que cuando se habla de este derecho intervienen muchos factores como el de las marchas, en el cual pareciera se restringe al derecho a la movilidad de la gente.

Asimismo, abundó, se presenta la paradoja en la que pareciera que la movilidad se limita a los que tienen coche, pero si se pone sobre la mesa esta discusión hay que considerar también a aquellos que viajan en transporte público.

Es entonces, dijo, que el reto pareciera ser el definir el derecho a la accesabilidad, para que “uno pueda acceder a los servicios que requiere en el menor tiempo posible y ello puede ser desde ir a la tienda, a trabajar, al hospital o a pasear”.

Bajo esta óptica, consideró que se tienen que cumplir con tres prioridades que implican la cobertura, es decir que sea un transporte que llegue a todos lados; la calidad, lo cual se hace difícil ya que se deben incluir varios factores como comodidad, tiempo, emisiones y otros; y que sea asequible.

En ese sentido, la responsable de Estrategia de Movilidad Urbana en la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Mariana Orozco, destacó el hecho de que en la Ciudad de México sean tan contradictorios los mensajes en el transporte.

Ello, comentó, se debe a que pese haber nuevas vías de hasta tres pisos aún se presenten problemas viales, además de contar con un servicio de transporte público deficiente no obstante su abundancia.

La funcionaria consideró que existen muchos retos ya que uno de los principales obstáculos que enfrenta los gobiernos es que existe deficiencia en los marcos normativos que impulsen políticas eficientes en el transporte.

Además, destacó la necesidad de ayudar a incrementar las capacidades institucionales, ya que muchas veces los funcionarios están atrapados en el paradigma del trasporte en donde al no haber una definición clara los esfuerzos terminan por definir un paradigma de mover carros y no gente.

Se suma también el reto de una comunicación integral entre los diferentes organismos, ya que ello lleva a los funcionarios a trabajar por inercia en lugar de emplear acciones eficientes en las que interactúen todos.

Desde luego existe el reto de definir una cultura de la movilidad ya que hoy en día pareciera que la gente se mueve en auto por cuestión aspiracional, ya que ello supuestamente implica que son mejores personas o que se pueden superar.

Al respecto, la presidenta del consejo directivo de Bicitekas, Areli Carreón, consideró absurdo esta mentalidad, así como el hecho que el gobierno, por esa falta de comunicación interna y definición de paradigmas, invierta más en obras que no se requieren.

En ese sentido, calificó de absurdo que “la ciudad dedique 70% de su inversión a 30% del transporte que solo mueve a 30% de la población ya que la mayoría se mueve sin autos”.

Además, se suman problemas que se deben considerar como el hecho de que los automóviles generan 60% de la contaminación, ocupan 90% del espacio de las calles y generan hasta el mismo porcentaje del ruido de la ciudad.

Insistió en la necesidad de definir esta visión de movilidad como una visión de eficiencia para trasladarse en el menor tiempo posible, de la manera más saludable y sin consecuencias de contaminación.