Plan Maestro del Nuevo Aeropuerto contempla remediación ecológica: EPN

En vez de una ampliación del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, como el que originalmente había anunciado la presente administración, esta mañana el secretario de comunicaciones y transportes anunció la construcción de un nuevo AICM en los terrenos federales que se encuentran a un costado del actual aeropuerto.

El despacho que se encargará del diseño de este proyecto es liderado por Norman Foster y Fernando Romero. En palabras de Gerardo Ruiz Esparza, se trata de un proyecto “moderno, vanguardista, con gran dosis de simbolismo mexicano, referente a nivel mundial y gran puerta de entrada a nuestro país”.

El proyecto fue elegido el pasado martes entre las propuestas de 8 despachos nacionales e internacionales, por un grupo de especialistas en aeronáutica y otras disciplinas. Ocupará una extensión de 640 hectáreas de las 12,500 que hay en la zona, contará con seis pistas que operarán de forma simultárea y se espera que transporte a 120 millones de pasajeros, 4 veces más que los que se transportan actualmente en el aeropuerto de la ciudad.

“Desde hace décadas se hizo evidente la necesidad de contar con nuevas instalaciones en el AICM, que representa una tercera parte del flujo de pasajeros del país, 32 millones al año y está al límite. Esto afecta nuevos negocios, el turismo y el desarrollo económico y social”, explicó Esparza.

Proyecto ganador

Los ganadores del proyecto, los arquitectos Norman Foster y Fernando Romero, presentaron una propuesta que recupera la “monumentalidad” de la tradición arquitectónica mexicana.

“No tiene columnas ni techo convencional, es una escultura que se extiende, que vuela, una obra hermosa que abre camino en su género. La llegada y partida serán inconfundibles”, afirmó el arquitecto Norman Foster, de Foster and Partners.

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La inversión para este proyecto será una mezcla de capital público y privado que suma 120,000 millones de pesos inicialmente y que, de acuerdo con Ruiz Esparza, parte de los ingresos del actual y del nuevo aeropuerto contribuirán al financiamiento. A esa cantidad se agregarían otros recursos para obras de movilidad e infraestructura.

De acuerdo con el presidente Enrique Peña Nieto se trata de un proyecto transexenal, por lo que está consciente de que “no habrá tiempo suficiente para poner en operación el nuevo aeropuerto, pero lo importante es que México cuente con él”. La decisión de impulsar su construcción es un acto de responsabilidad “no mirando qué podemos entregar en corto plazo. Es el aeropuerto que merecen todos los mexicanos y por eso la firme decisión de llevarlo a cabo”.

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Peña explicó que la construcción se llevará a cabo en dos etapas:

1ª, en la que funcionarán tres pistas de forma simultánea y podrán transportar a 50 millones de pasajeros y realizar 410 mil operaciones al año.

2ª, en la que hará seis pistas funcionando, para transportar a 120 millones de pasajeros y hacer un millón de operaciones anuales.

Al respecto, es importante resaltar que el actual AICM tiene dos pistas, pero no pueden operar de forma simultánea.

De acuerdo con Peña Nieto, desde el primer día de su mandato ordenó estudios de factibilidad financiera y rentabilidad social de este proyecto a fin de encontrar las alternativas más adecuadas para impulsarlo. Una vez identificado que el lugar ideal para la construcción era la zona contigua al actual aeropuerto, se procedió a convocar a los despachos de arquitectos para que presentaran sus propuestas.

Diseño de interiores del nuevo aeropuerto

La firma de arquitectura SPACE, liderada por Juan Carlos Baumgartner, será la encargada del diseño interior del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México.

"Personalmente siempre he considerado a Norman Foster como uno de los arquitectos más influyentes del mundo, tener la oportunidad de trabajar con él para lo que será uno de los mejores aeropuertos del mundo es una oportunidad única", señala la firma en un comunicado de prensa.

SPACE estuvo a cargo del diseño de la Terminal 2 del actual aeropuerto capitalino.

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Medio ambiente

El arquitecto Foster informó que se buscará que este nuevo aeropuerto tenga la certificación LEED Platinum , otorgada por  Leadership in Energy & Environmental Design, certificadora internacional que reconoce a los edificios sustentables. El nivel platino es el más alto y contempla aspectos de diseño, construcción, mantenimiento y operación.

En términos de impacto ambiental de la zona, el gobernador mexiquense dio a conocer que se trabajarán diversos aspectos en la nueva obra:

-        El uso de 100% de energías renovables y, a la par de otros aeropuertos, tener una huella neutral de carbono;

-        En cuanto a los residuos, tres aspectos: aprovechamiento de recursos orgánicos para generar energía, reciclaje de residuos y disposición adecuada de residuos peligrosos,

-        En materia hidráulica, además de las obras de drenaje profundo que ya se llevan a cabo, la limpieza de nueve ríos,  uso eficiente y tratamiento del agua;

-        Ordenar el crecimiento urbano de la región de forma sustentable y regular la creciente mancha urbana;

-        Hacer una movilidad sustentable dentro, mediante el uso de bicicletas y transporte eléctrico.

Adicionalmente, Ávila aseguró que el Estado de México donará 760 hectáreas adicionales para hacer lagunas de regulación hídrica adicionales en la zona, a fin de conservar este importante cinturón ecológico.

Miguel Angel Mancera, jefe de gobierno del Distrito Federal, agregó que se impulsarán con Sacmex y Conagua importantes obra para disminuir riesgo de inundaciones en la zona conurbada y para incrementar la capacidad del drenaje.

 

Empleos y derrama económica

Los funcionarios presentes en el anuncio señalaron que la construcción del aeropuerto generará más de 160,000 empleos directos. De acuerdo con Peña, también “favorecerá la contratación de cientos de pequeñas y medianas empresas”.

Y una vez construido, aseguró el gobernador mexiquense, generará 600,000 empleos más y se dinamizará el mercado inmobiliario de la Zona Metropolitana de la Ciudad de México.

A la construcción del aeropuerto se agrega la habilitación de nuevas vías de comunicación y la construcción de nueva infraestructura, para facilitar la movilidad desde y hacia el nuevo aeropuerto.

Peña Nieto afirmó que el gobierno federal trabajará coordinadamente con los gobiernos de Ciudad de México y Estado de México para desarrollar la infraestructura que facilite la construcción y operación del nuevo aeropuerto.

En términos de impacto económico, se trata de la obra más grande y ambiciosa de la época actual y se espera que detone derrama económica en términos de mayor turismo, mayor desplazamiento de mercancías, participación de nuevas líneas aéreas, mayor oferta de vuelos y por tanto mejores precios y manejo adecuado de una zona densamente poblada. De acuerdo con Ruiz Esparza, será la oportunidad para convertir a México en una plataforma legal con alto valor agregado

 

El futuro del actual aeropuerto

Una vez que el nuevo aeropuerto esté en operación, los terrenos del actual AICM se convertirán en áreas verdes, albergarán instituciones de educación superior, capacitación, desarrollo técnico, espacios culturales, centros de salud y deportivos, además de que albergarán obras de transporte multimodal.

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