El Metro llega a sus 46 años con rezagos y casos críticos
El Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro cumplirá 46 años de servicio este martes 1 de septiembre, tiempo durante el cual ha llevado a su destino a más de 55,176 millones de personas, lo que equivale a 7.5 veces la población mundial. Sin embargo, llega con múltiples fallas, rezagos y casos críticos señalados por el mismo director del servicio.
En un comunicado, el STC indicó que a 46 años de vida, los retos inmediatos son la renovación del parque vehicular, el mantenimiento continuo a las instalaciones, el desarrollo tecnológico para la autoproducción de refacciones y un mejor equilibrio entre la demanda de servicio y la oferta de trenes.
Lo anterior, para atender el desgaste de equipos y mantener niveles óptimos de transportación de los 5.3 millones de usuarios diarios. Rumbo al medio siglo de existencia, el STC continúa su consolidación como la columna vertebral del transporte público en la ciudad de México y la zona metropolitana.
Creado por decreto presidencial en 1967, como un organismo público descentralizado, el Metro ha cumplido sus objetivos principales, que son la construcción, operación y explotación de un tren rápido con recorrido subterráneo y superficial para el transporte colectivo en el Distrito Federal.
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El primer tramo del Metro, de Zaragoza a Chapultepec, contó con 16 estaciones y 12.6 kilómetros de extensión, en la actualidad la red consta de más de 226 kilómetros de vía y 195 estaciones, de las cuales 28 son de correspondencia para facilitar la interconectividad entre líneas.
En estos 46 años, el STC Metro ha ofrecido más de 17,000 días continuos de servicio, en los que sus trenes han recorrido la distancia correspondiente a más de ocho viajes, de ida y vuelta entre la tierra y el sol, de acuerdo con un comunicado del organismo.
“Seguro, a pesar de las fallas”
El 12 de agosto de 2015 el director del servicio, Jorge Gaviño, presentó un diagnóstico preliminar de la situación de ese transporte y dijo que "es seguro para los usuarios a pesar de las fallas y rezagos que presenta".
El funcionario, nombrado en el puesto el 15 de julio pasado, dio a conocer que en las instalaciones se tienen durmientes en mal estado, al igual que algunas barras guía y rieles desgastados, aparatos de vía y de protección eléctrica con desajustes y desgaste, interruptores, seccionadores y protecciones eléctricas con alta frecuencia de averías.
También reveló que la infraestructura civil, túneles, viaductos y estaciones, se encuentran afectadas por los asentamientos diferenciales por las condiciones del subsuelo, lo que provoca deformaciones en las vías.
Resaltó el caso de la línea A (Pantitlán -La Paz), la línea 5 (Pantitlán- Politécnico), la Línea 9 (Pantitlán-Tacubaya) en su parte elevada, y la línea 3 (Universidad- Indios Verdes) en su parte superficial; segmentos que requieren obras mayores y la estación Pantitlán "es un caso crítico".
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El director del sistema reconoció que en los trenes persiste "un gran retraso de los programas de mantenimiento por falta de refacciones, materiales e insumos".
Además se tiene una "carencia de trenes de operación originada por trenes detenidos y falta de refacciones que se canibalizan, dado que se transforman en bancos de refacciones".
Gaviño dijo que se ha reducido a más de la mitad la fiabilidad de los trenes, establecida por los kilómetros recorridos entre fallas, pues mientras en 2007 se tenía una falla cada 5,756 kilómetros, ahora se tienen cada 1,700 kilómetros, en promedio.
*Con información de Notimex
