Tres grupos buscan construir subestaciones eléctricas del NAICM
Tres grupos empresariales presentaron este lunes sus propuestas para la licitación de la construcción de subestaciones y acometida eléctrica del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM).
Las compañías hicieron propuestas económicas hasta por 1,900 millones de pesos.
Isolux de México e Isolux Ingeniería presentaron una oferta por 1,190 millones 994,104 pesos; el grupo de Avanzia Instalaciones, Control y Montajes Industriales de México e Iberoamericana de Hidrocarburos propusieron una inversión de 1,189 millones 752,0388 pesos.
Mientras que Proyectos y Construcciones Urisa plantearon recursos por 1,114 millones 845,394 pesos.
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De acuerdo con las prebases de la licitación, la subestación contará con equipo primario para el suministro de energía eléctrica con bahías para línea, banco de transformación, amarre de barras y transferencia, y equipo de barras.
Así como con un tablero; sistema de extinción de incendios mediante agua nebulizada de alta presión y un transformador tipo pedestal.
También, incluirá una caseta de control con tableros de corriente alterna y directa. Así como con fuentes de corriente directa; un banco de baterías del tipo plomo–ácido abiertas y una planta generadora diésel para alimentación de respaldo de los servicios generales de la sala principal de control.
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El conjunto de estas obras contempla, entre otros detalles, la instalación de sistemas de cableado para el suministro de energía eléctrica, cuyas especificaciones están señaladas en las prebases.
También, tendrán empalmes premodelados; terminales; accesorios y soportería para cables de potencia, con cubierta antifuego y retardante de flamas.
Además, contará con cable dieléctrico con fibras ópticas integradas, sus respectivos herrajes y accesorios; sistema de puesta a tierra por conexiones especiales; señalización y material de repuesto conforme a las normas referidas.
La empresa Abengoa presentó una carta de disculpa para dejar de participar en la licitación del proyecto.
Mientras que un representante de la empresa alemana Siemens estuvo presente como observador.
