Asignaciones directas sí son alternativa, dice líder constructor
El problema no son las adjudicaciones directas, sino la discrecionalidad con la que éstas se realizan, consideró Gustavo Arballo, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), al comentar el Índice de riesgos de corrupción: el sistema mexicano de las contrataciones públicas, elaborado por el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco).
El índice realizado por el Imco calcula que 70% de 700,000 procesos de compras públicas ocurridas en lo últimos cinco años se adjudicaron de manera directa, y en términos de monto representaron 59% de lo adjudicado, haciendo de la excepción una regla, lo que considera como "prácticas adversas a la probidad y eficiencia del gasto federal", aunque no por ello son "casos específicos de corrupción".
Gutavo Arballo expresó al respecto: "Yo estoy de acuerdo en las asignaciones directas de montos, por ejemplo de hasta 10 millones de pesos, porque nos evitamos costos de los procesos licitatorios, tiempo… No quiere decir que porque se asigne de forma directa sea incorrecto el precio y demás; lo que siempre sucede es que se aplica a discrecionalidad del funcionario, se atiende nada más a algunos, dejando a otros fuera, y ahí empiezan los problemas".
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El Imco ubicó a las dependencias con mayor riesgos por prácticas no competitivas: Comisión Federal de Electricidad, Instituto Mexicano del Seguro Social, Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado, Aeropuertos y Servicios Auxiliares y la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.
Para Gustavo Arballo, si tenemos leyes que dejen claramente establecida la asignación directa y hasta qué monto, ésta sí es una alternativa, pues las leyes mismas (de los distintos estados) exceptúan casos en los que se puede aplicar. Por ejemplo, en casos de emergencia, de seguridad nacional, que a veces pueden estar apegados a la ley, aunque no de manera correcta.
"Lo que no concibo es que se asignen directo más de 500 millones de pesos, porque entonces sí, eso está fuera de toda norma", dijo Arbajo.
El presidente de la CMIC también refiere las licitaciones por invitación restringida que contempla la ley, y en las que hay que invitar al menos a tres concursantes.
"Son una buena vía para agilizar procesos", dice Arballo e insiste en que "el problema es que no hay condiciones de igualdad para que todos participen; debemos trabajar mucho más allá de la ley para generar condiciones equitativas, y si hay un porcentaje que se pueda asignar de manera directa, pues que se haga".
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Y advierte: "Hay que vigilar la forma. Si todos los días le estoy asignando a mi compadre, pues eso es lo que ocasiona molestia, y eso es lo que está mal".
De acuerdo con el IMCO, las empresas que más ganaron contrataciones en 2016, "pasaron de tener el 16% del monto total adjudicado en 2012 a tener el 51%, equivalente a un incremento del 218% de su participación".
