Idinsa ha participado en grandes obras de infraestructura y edificación a través de los sexenios. Desde la nueva sede del Senado en Paseo de la Reforma, hasta el Distribuidor Vial de San Antonio y las líneas del Metrobús de la primera a la cuarta.
“Exigente, pero pagador”, dice Idinsa sobre el gobierno actual
Este sexenio tampoco está exenta de participación en obras emblemáticas. Fue la empresa que edifica el trolebús elevado, el puente atirantado del tren México-Toluca, los patios de ferrocarriles de Dos Bocas y la conexión terminada del AIFA en San Jerónimo.
“Mi experiencia, que estoy participando (en obras del gobierno) es que hemos tenido todo el apoyo por parte del cliente, el gobierno, y ha funcionado bien todo. La Ciudad de México es exigente, pero pagadora, en Dos Bocas son exigentes, pero van pagando”, dijo Víctor Ortíz Ensástegui, fundador y presidente del consejo de la empresa el marco de los Foros de Infraestructura de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) este 2022.
El elemento de mayor presión ha sido el tiempo. Una de las prioridades del gobierno actual es entregar las obras antes de que termine el sexenio.
“Hay obras que sí se pueden meter, en lugar de dos tractores, hasta 20, para que se acaben más rápido. Pero hay otros que necesitan otro proceso, como el caso del puente atirantado en el que son dos columnas muy grandes y luego van los tirantes y tienen que crecer poco a poco. Si ahí dice que me tardo siete días por cada uno de los avances del carro, me voy a tardar siete días. No hay forma de que me lleve menos”, detalla el empresario de la obra que, considera, terminarán a mediados del año siguiente.
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Trolebús Elevado
Anunciado como una de las obras más prometedoras de la actual administración del gobierno de la Ciudad de México, el trolebús elevado en Iztapalapa como una de las soluciones del oriente de la capital.
La obra está a cargo de Idinsa y se planeaba inaugurar en noviembre de 2021, pero la obra ha tenido retrasos. “Hubo un tema de suministro mundial de logística, hubo un tema con el precio de acero, de repente se convirtió en un commoditie en oferta y demanda, de repente subió el precio cerca del doble, pero la CDMX está consciente de eso”, dijo el directivo.
Actualmente, mientras las obras continúan, la empresa estudia la reprogramación de gastos junto a las autoridades para estudiar los nuevos costos de la obra.
Independientemente de los problemas de materiales, la obra deberá estar terminada durante el primer semestre de este año, explica “será una obra en la cuál le tengo mucha fe al Trolebús Elevado, porque es al revés de lo que se hizo años atrás con los dobles pisos eran para el transporte individual y ahora se hace para que ahí vaya el trolebús articulado con el transporte masivo, es un cambio importante para la ciudad”, dijo.
Lo que le falta a los proyectos de infraestructura
Desde su experiencia, Víctor Ortíz Ensástegui ha identificado un problema en los proyectos de infraestructura: los tiempos de planeación.
“Para un país necesitamos tener una planeación integral que nos permita poder definir cuáles son las áreas en las que vamos a intervenir en cada una de las partes del país, de tal manera que podamos definir una vocación de tierra (...) por eso hablo del Instituto de Planeación como una buena práctica a nivel mundial, que nos permite saber qué vamos a construir y que esté por encima de los periodos sexenales”, dijo.
El empresario considera que también se debe continuar con la colaboración entre el gobierno y la industria privada, “es un tema de inversión mixta en el que el gobierno pone el área de trabajo, uno consigue el crédito, se cobra por el servicio y en un periodo razonable se recupera la inversión. Se paga al que invirtió, al que construyó y esa infraestructura se queda en el país”, agrega.