“Todos lo aplaudimos, es algo que es necesario y este gobierno lo había ya anunciado, en estos dos paquetes, los que hicieron el 5 de octubre y ahora en noviembre, suman 68 por alrededor de 520,000 millones de pesos, lo que representa 2.3% del PIB”, comenta a Obras y Expansión Eduardo Ramírez Leal, presidente nacional de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC).
Aunque la estrategia ha sido bien recibida, no es suficiente para activar a la infraestructura en el país. El déficit de financiamiento al sector viene desde por lo menos un lustro atrás, lo que ha provocado un déficit profundo en la creación de obras que, además de mejorar el funcionamiento del país, detonaría una evolución en la economía.
Para Roberto Ballinez, director ejecutivo senior de Deuda Subnacional e Infraestructura de HR Ratings, uno de los puntos a mejorar es el número de proyectos. El año pasado, el gobierno anunció que en conjunto con la IP preparaban 1,600 nuevas construcciones dentro del Plan de Infraestructura, el cual no se presentó este 2020. En su lugar, se realizaron menos de 70 propuestas.
Del total de construcciones, 17 ya están en marcha, lo que para el experto es una buena noticia. No obstante, aún falta mucho para conocer cuándo se hará realidad el resto. “Para que un proyecto se eche a andar hay un trabajo muy intenso antes. La planeación, las autorizaciones… son temas muy importantes que hay que cuidar. Una barrera que hay que sortear en el futuro. Por lo mismo sí estaríamos viendo en ejecución estos 51 proyectos que quedan por planearse, a finales del año próximo o el 2022”, explica Ballinez. Por lo tanto, la derrama económica y producción derivada de las obras se vería reflejada hasta entonces.
Otro punto relacionado, es el financiamiento. Serán requeridos recursos públicos, principalmente para los correspondientes a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), de los cuáles no todos tienen un monto asignado según el Paquete de Egresos de la Federación del 2021, apunta el experto de la calificadora HR Ratings.
Para la CMIC, también es importante que este tipo de propuestas continúen, pero también con la inclusión de micro, pequeñas y medianas empresas, pero no a través de la subcontratación, sino que de manera directa. Esto les permitiría subsanar el daño ocasionado durante el último año.