El Tren Maya se desarrolla en la sombra de la veda electoral

Desde entonces, la información referente a la obra ha venido de personas que viven cerca a las obras, organizaciones civiles que siguen de cerca el tema y tribunales.

Recientemente, un grupo de artistas publicó un video hablando sobre la deforestación en Quintana Roo y pidió al gobierno un cambio de ruta, lo que volvió a poner al proyecto en el ojo público.

¿Qué es lo último que se sabe del Tren Maya?

Las voces del proyecto del sureste se apagaron justo después de que se anunciara una modificación a la ruta en el Tramo 5, que recorre la Riviera Maya, y del anuncio de expropiación de predios en la zona para hacer un nuevo trazo.

El cambio se derivó de dos acontecimientos. El primero, explicado por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), que construye la parte norte, fue que la inestabilidad del suelo haría que la obra se retrasara.

“Por la complejidad técnica, el señor Presidente de la República solicitó el apoyo de los ingenieros militares de la Secretaría de la Defensa, y aquí estamos. Es por ello que se nos encomendó este tramo, porque es muy difícil técnicamente, y contamos con toda la experiencia para hacerlo, pero empezamos tarde”, dijo Raúl Manzano a La Jornada En enero de este año.

Antes, el plan era edificar 1,200 columnas para construir un viaducto elevado, pero la actividad era tardada y la prioridad del proyecto, como ha dicho el presidente Andrés Manuel López Obrador, es terminarse a tiempo.

A la par, empresarios de la Riviera Maya pidieron cambios en la ruta, debido a que el primer plan causaría afectaciones a la zona hotelera, principalmente al tráfico vial, lo que puede tener impacto en el turismo.

Esto se llevó a cabo bajo la dirección de Javier May, antes secretario de Bienestar, quien entró en sustitución de Rogelio Jiménez Pons en enero.

El siguiente paso fue un anuncio de expropiación de terrenos en Quintana Roo,198 en su primera etapa. “Esto no quiere decir que los predios a los que se les notifique que en primera instancia se vayan a expropiar (...) en su gran mayoría son concertadas. Esto se debe a que muchos de los predios tienen gravámenes y la única manera de resolverlo de manera rápida y ágil es a través de un proceso de expropiación concertada”, dijo Román Meyer Falcón en conferencia de prensa.

Luego de que comenzara la veda, hubo un segundo anuncio con 335 terrenos más. En este periodo en el que los titulares de Fonatur se han tenido que mantener en silencio, se dio a conocer que un tribunal suspendió los permisos medioambientales otorgados por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).

“La suspensión conlleva el cese de todo trabajo derivado de tal autorización, que implique deforestación o puesta en riesgo de especies animales o vegetales autóctonas”, dice el fallo, que afecta a Chiapas, Campeche y Tabasco.

¿Qué pasa con el Tramo 5?

Desde la planeación del trazo del Tren Maya y las licitaciones, este fue el trazo más complicado por la zona que atraviesa. El gobierno tuvo que dividir el tramo en la parte Norte y Sur y responsabilizar al Ejército de una sección. La otra fue otorgada a México Compañía Constructora.

Su construcción fue una de las que comenzó más tarde y una vez que ya había empezado en Playa del Carmen, fue cuando se modificó la ruta, lo que dejó una parte de la construcción sin aprovecharse.

Durante la veda electoral se ha dado a conocer por medios de comunicación locales y personas que viven en zonas aledañas que en este tramo, en el que no se conocía ruta definida hasta febrero, se ha realizado tala de árboles y actividades perjudiciales a los cenotes.

Las actividades se han llevado a cabo sin que se dé a conocer la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), necesaria para iniciar las construcciones. Principalmente porque la zona que actualmente se interviene está en la selva.

La organización Moce Yax Cuxtal ha documentado que el área de deforestación abarca aproximadamente 12 kilómetros.

¿Cuándo estará listo el Tren Maya?

El presidente Andrés Manuel López Obrador prometió que, pase lo que pase, el Tren Maya comenzará con pruebas operativas a finales de 2023, por lo que este 2022 debe estar terminado al menos 50% de la construcción.

Para acelerar las labores todas las obras de infraestructura del gobierno federal fueron declaradas como de “seguridad nacional”, lo que además de permitir que se reserven datos de contratos, implica: “otorgar la autorización provisional a la presentación y/u obtención de los dictámenes, permisos o licencias necesarias para iniciar los proyectos u obras a que se refiere el artículo anterior, y con ello garantizar su ejecución oportuna, el beneficio social esperado y el ejercicio de los presupuestos autorizados”.