Las cifras de Airbnb demuestran sus beneficios más allá de polémicas
Nota del editor: Este artículo se publicó originalmente en el suplemento Valor Inmobiliario de Expansión, correspondiente al periodo de Primavera 2018.
A partir de su creación en 2008, Airbnb ha redefinido el concepto de hospitalidad y se ha convertido en la plataforma de economía colaborativa de mayor tamaño en esta industria, al ofrecer un nuevo concepto de hospedaje.
Con base en información de la empresa, el consumo colaborativo aprovecha la tecnología y comunicación en línea para compartir los bienes y servicios de manera temporal o permanente, entre individuos, de forma gratuita o por una tarifa. Haciendo con esto más eficiente la ocupación de inmuebles.
Las cifras de México
Durante 2016 la actividad económica generada por la comunidad de anfitriones y huéspedes de la plataforma de hospedaje en la capital del país fue de 1,574 millones de pesos (mdp). El ingreso en 2016, de un anfitrión típico por compartir su espacio 25 noches, en promedio fue de 47,000 pesos, sin contar la derrama económica generada entre los residentes, proveedores y empleados de la zona.
Con base en la información proporcionada por Airbnb, en el país hay 52,500 socios activos, de los cuales 8,700 se localizan en la Ciudad de México, 50% son mujeres, lo cual habla de la importancia de su participación en la industria de la hospitalidad. "Las mujeres son la fuerza que impulsa a la comunidad Airbnb", señaló Chesky.
Un caso de éxito
Martha y Francisco son anfitriones en Ciudad de México y el puerto de Acapulco. Esta pareja, amante de los viajes, conoció las bondades de Airbnb y decidieron, en 2013, abrir las puertas de sus propiedades a turistas de todo el mundo. Desde entonces no han dejado de recibir huéspedes (en promedio 10 al mes), en su mayoría de Estados Unidos, pero también de Asia, América Latina y Europa.
Para la pareja, el dedicarse al tema de la hospitalidad ha sido una experiencia enriquecedora que les permite tener ingresos para vivir bien, sufragar sus gastos y darles la oportunidad de viajar y disfrutar de su familia en distintos países y ambientes.
En la Ciudad de México, el costo promedio del alojamiento en Airbnb es de 1,175 pesos por noche (64 dólares). Con base en las estadísticas de la misma plataforma, durante 2017, los ingresos semanales promedio de los anfitriones fueron de 4,238 pesos en propiedades completas; una habitación privada, 2,366 pesos y en una habitación compartida 1,706 pesos.
Con este promedio de ingresos, los anfitriones pueden destinar entre 10% y 15% a gastos de mantenimiento, de 20 a 25% a servicio (agua, luz, gas, teléfono, televisión por cable, internet, entre otros). "Lo cual nos permite tener un margen de ganancia y sobre todo una propiedad más atractiva para nuestros huéspedes", señala la pareja de anfitriones.
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Por lo que se refiere al pago de comisiones, el propietario recibe 94% del ingreso; del resto, 3% es para Airbnb por tarifa de servicio y el otro 3%, en el caso de la CDMX y Quintana Roo, es el impuesto correspondiente por hospedaje. En estos destinos, la plataforma se encarga de retenerlo y pagarlo a la autoridad tributaria correspondiente.
A los huéspedes se les cobra antes de la llegada. El dueño recibe el pago una vez que los turistas están en el alojamiento.
Para ser un anfitrión exitoso
El esmerado trato que Martha y Francisco ofrecen a sus huéspedes ha generado buenas reseñas y una calificación de cinco estrellas, lo cual los ha hecho acreedores al título de súper anfitrión (superhost). Esta situación ha redundado en más solicitudes de hospedaje en sus propiedades.
La pareja explica que la plataforma tiene las características para usarse como una herramienta que les permite conocer la opinión de los huéspedes, para mejorar el servicio. Además, ellos también pueden evaluar a los visitantes.
En la opinión de Martha, el secreto del éxito radica en el buen trato a los huéspedes, "hacemos lo posible porque se sientan como en su casa, les mostramos nuestro barrio, nos esmeramos por responder a todas sus necesidades, además de compartir los enormes atractivos de las ciudades donde los hospedamos. Esto ha hecho que regresen, lo cual nos da mucho gusto".
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Otro beneficio que destacaron, es contar con un club de anfitriones (Home Sharing Clubs) en donde pueden intercambiar experiencias y apoyarse cuando se presenta un problema, o para ofrecer mejores servicios a sus clientes. Por ahora, este servicio solo está disponible en CDMX, Quintana Roo y Guadalajara.
Por otra parte, el mantenimiento y las mejoras continuas a sus propiedades han redundado en un incremento de su valor inmobiliario.
"No hemos consultado esto con un especialista, pero después de tener abandonada la casa de San Ángel (CDMX) durante un tiempo, ahora el mantenimiento es inmejorable", dicen.
También explicaron que como anfitriones: "Siempre buscamos información de la persona que va a llegar para ofrecerle una mejor atención. Intercambiamos mensajes para conocer el motivo de su viaje, lo que les interesa hacer y conocer. Tenemos muchos amigos entrañables que comenzaron siendo nuestros huéspedes".
Haz negocio con ellos
Por las facilidades que la plataforma ofrece, representa una opción de ingresos para quienes quieran incursionar como anfitriones y contribuir con ello a incrementar la rentabilidad y el valor de su propiedad, gracias a las mejoras constantes y el mantenimiento que le puedan dar.
Para quienes quieren ser parte de la comunidad de anfitriones en todo el mundo, Airbnb les ofrece la opción de registrarse y aunciarse de manera gratuita.
Para garantizar que la tarifa que fijas a tu propiedad es la correcta, cuando un nuevo anfitrión crea un anuncio, Airbnb sugiere un precio, tomando en cuenta la ubicación, espacios y servicios.
A partir de esta recomendación, se pueden establecer tarifas por noche, por semana o por mes. La plataforma incluso cuenta con la herramienta Precios Inteligentes para auxiliar a los anfitriones en establecer la tarifa pues, como en cualquier modelo de negocio inmobiliario, estar fuera de mercado provocará que tu propiedad se vuelva poco atractiva y se quede estancada entre todas las opciones.
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Airbnb le pide a sus anfitriones cumplir cinco requisitos:
1. Proporcionar servicios esenciales (jabón, toallas, sábanas, ropa de cama y papel higiénico)
2. Responder las solicitudes de reservación en un plazo de 24 horas
3. Aceptar las solicitudes siempre que la disponibilidad lo permita
4. Evitar cancelaciones
5. Mantener una calificación alta
A cambio de esto, la plataforma apoya a los anfitriones con una garantía por 1 millón de dólares (mdd), en caso de que se produzcan daños por accidente a su propiedad, sin ningún costo adicional.
Otro beneficio para ellos, también sin costo, es un seguro de protección, hasta por 1 mdd, el cual aplica en caso de que los huéspedes resulten heridos u ocasionen daños a la propiedad o a las aledañas. También protegen al anfitrión en caso de una demanda por responsabilidad.
Ahora apuntará al alto lujo
A una década de haber nacido, Airbnb ya tiene nuevas propuesta. A principios de marzo de este 2018 dio a conocer dos nuevas opciones llamadas Airbnb Plus y Beyond by Airbnb, dirigidas al sector que busca opciones de lujo para su alojamiento, o como lo definió Brian Chesky, "casas bonitas con anfitriones excepcionales".
Para certificar una propiedad con el distintivo plus, la empresa verificará que cada uno de los espacios tenga una calificación por parte de los huéspedes de al menos de 4.8 puntos (de los cinco máximos), y que cumplan con una lista de 100 requisitos.
Entre los servicios que ofrece Airbnb Plus están: amenidades en el baño, decorados con obras de arte, cerradura digital o con código, alberca, por mencionar algunas.
En cuanto a la categoría Beyond by Airbnb, su enfoque es hacia estándares más altos, es decir, espacios exclusivos, las mejores casas del mundo; esta categoría será lanzada en los próximos meses.
Chesky anunció incentivos económicos para los anfitriones de estas categorías, así como a los huéspedes frecuentes.
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También paquetes completos
Otra de las nuevas opciones, lanzadas en 2017 fue Experiencia Airbnb, servicio que ayuda a planear viajes completos. A través de esta novedad, Airbnb orienta al turista sobre los mejores sitios para alojarse, comer y conocer. }
Las excursiones o actividades diseñadas y dirigidas por anfitriones locales generan oportunidades económicas y les permiten liberar sus pasiones, talentos e intereses y obtener ingresos de ello, además de crear experiencias interculturales con los viajeros, por ejemplo, tomar un cursos de sombrerería en Londres.
En México, el concepto llegó el verano pasado y hasta el momento se han registrado 100 experiencias, entre ellas una degustación de mezcal conducida por un experto. En la Ciudad de México está la experiencia Taco Club, en la que un grupo de locales llevan a turistas a visitar las mejores taquerías.
Airbnb aplica una comisión por servicio de 20% a los anfitriones, tanto de experiencias individuales, como de experiencias grupales. La cantidad de la comisión por servicio se calcula a partir del precio fijado por los anfitriones. En el caso de experiencias en las que se involucren organizaciones sin fines de lucro, la plataforma no cobran comisión por el servicio.
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El factor en contra
El mayor impacto se refleja en la industria hotelera tradicional. Según los datos del estudio realizado por la Universidad de Boston (The Rise of the Sharing Economy: Estimating the impact of Airbnb on the Hotel Industry), hay inconformidad del sector hotelero por la plataforma, al considerar que no paga los mismos impuestos, ni cumple con la misma legislación que ellos.
Ante esto, Airbnb muestra las cifras que reflejan la manera en que favorece el turismo y lleva dinero, mediante su esquema de economía colaborativa, a las ciudades, sobre todo en zonas donde hace falta infraestructura hotelera.
En el citado estudio, el investigador Davide Prosperio documenta que por cada aumento de 1% en la oferta de Airbnb en una ciudad, los hoteles pierden 0.05% de sus ingresos: "Puede parecer una cifra muy baja, pero el ritmo de crecimiento de la compañía es muy rápido", explica en el estudio.
Y para muestra menciona la declaración de Brian Chesky, CEO de Airbnb: "La cadena Marriott quiere aumentar 30,000 habitaciones este año. Nosotros lo haremos en las próximas dos semanas".
Para el investigador de la Universidad de Boston, si el ritmo de crecimiento de la plataforma no para, puede convertirse en la primera empresa de hospedaje del mundo, y los hoteles se verían obligados a cambiar su estrategia.
Finalmente, otro aspecto que Prosperio destaca en su investigación es que los hoteles más afectados por la actividad de Airbnb habían sido los de categoría baja y media. "Es difícil pensar que Airbnb compita con los hoteles de lujo, porque no ofrecen lo mismo en temas de servicios y amenidades como salas de reuniones, o un spa". Esta afirmación era cierta hasta el año pasado.