Sin embargo, este 2021 la llegada de Joe Biden cambiará un poco la jugada. El cambio de gobierno y la recuperación de la economía provocarán que los intereses aumenten —en busca de la estabilización—, aproximadamente 3.4%, así como los precios de los inmuebles residenciales, apunta el experto.
También considera que la demanda incrementará con la configuración al DACA, quienes podrán residir en el país y adquirir préstamos para comprar residencias.
Mientras tanto, habrá escasez de unidades mientras el mercado intenta poner a la venta nueva producción, lo que trae liquidez a la industria, explica Alejandro Dabdoub, inversionista y partner de Allied Orion Group; “hay mucha liquidez en el sector, hay una pelea por los terrenos en tema de vivienda. Nosotros en Carolina del Norte hicimos un análisis para desarrollar departamentos en renta y hubieron, por el mismo terreno, 40 ofertas para gente que quería construir departamentos en el terreno”, cuenta el especialista.
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Pistas a seguir
Como es normal, hay ciudades más prometedoras para la compra de vivienda debido al aumento de demanda existente.
En Estados Unidos sucedió algo similar a México: las personas se cansaron de pasar el confinamiento en ciudades saturadas que representaban riesgo para su salud, y decidieron salir de sus departamentos pequeños —impulsados también por el home office—, para vivir en casas grandes de los suburbios, comenta Dabdoud.
Algunos estados que se han vuelto populares son Arizona, Texas y Nevada, en donde se pueden encontrar viviendas de entre 120 mil y 450 mil dólares.