La transformación de los centros comerciales implica una inversión adicional, pero los desarrolladores ven en ella una oportunidad para aumentar la rentabilidad. Según los datos proporcionados por CBRE, la inversión en estas nuevas características no suele superar 5% del valor total de la propiedad, pero puede generar un retorno significativo.
El ejecutivo de Fibra Shop ilustra este punto con un ejemplo concreto: "Lo que hemos visto, por ejemplo, en La Perla, que en un centro comercial o una propiedad comercial normal en México que tenga cines y restaurantes, la gente se queda aproximadamente entre hora y hora y media. En estos nuevos conceptos la gente se está quedando dos horas y media".
Esta mayor permanencia se traduce en beneficios tangibles, según los análisis de CBRE:
- Las rentas variables (basadas en las ventas de los locatarios) son entre 20% y 30% más altas que en centros comerciales tradicionales.
- Los ingresos por estacionamiento pueden llegar a ser hasta un 50% mayores.
Un elemento que ha ganado relevancia en los centros comerciales son los kioscos o islas. "Los kioscos en centros comerciales, los premiums se han valorizado muchísimo, han subido sus precios de manera muy importante. Yo creo que esto vino primero, o surgió a partir de Mítikah, fue la primera vez que se escuchó que se cobraba un guante (renta extra) por un kiosco", señala el experto de CBRE.
Los nuevos centros comerciales también apuestan por la sostenibilidad y la eficiencia energética. El CFO de Fibra Shop comparte sus metas en este sentido: "Hoy el 25% de nuestra energía que consume Fibra Shop en toda la compañía es energía solar, es decir, energía que reduce la huella de carbono, que emite menos gases de efecto invernadero. Tenemos una meta de en dos o tres años llegar al 50% en ese indicador".
Grandes propuestas, pequeños espacios
A pesar del optimismo, el sector enfrenta desafíos. La disponibilidad de espacios adecuados en zonas urbanas densamente pobladas es una preocupación, aunque los desarrolladores ven oportunidades en ciudades medianas y zonas metropolitanas en crecimiento.
Pero la clave está en abrir el panorama. Carlos Sánchez dice que fuera de los mercados tradicionales existen opciones prometedoras y con suficiente terreno a desarrollar, "hay muchas ciudades medias, grandes y zonas metropolitanas que van creciendo. Es crucial hacer un buen análisis de ubicaciones, considerando ciudades cuya zona de influencia tiene alrededor de un millón de habitantes".
El fenómeno del nearshoring también crea nuevas oportunidades para el desarrollo de centros comerciales en regiones que atrayen inversión industrial.
Se van a generar polos de inversión creando plantas o propiedades orientadas a la industria, pero hay que ponerle casas, hay que ponerle comercio, hay que ponerle vialidades
Carlos Sánchez, Manager del área de Retail para CBRE México.
La evolución de los centros comerciales en México refleja una tendencia global hacia espacios más integrados y experienciales. A medida que estos "centros de vida" continúen desarrollándose, prometen no solo transformar el paisaje urbano, sino también la forma en que los mexicanos interactúan, compran y disfrutan de su tiempo libre.
El éxito de estos nuevos conceptos dependerá de su capacidad para adaptarse a las cambiantes necesidades de los consumidores y de crear espacios que verdaderamente enriquezcan la vida comunitaria. Como concluye el CFO de Fibra Shop: "Si tú creas una propiedad donde es amigable con el medio ambiente, que además te fomenta otras actividades culturales, deportivas, y además te da una oferta de entretenimiento, y además te da una oferta gastronómica, y además te da una oferta de bienes y servicios que necesitas, pues lo que ha logrado esto es que es un modelo muy exitoso".
El reto está en lograr un equilibrio entre la rentabilidad, la sostenibilidad y la creación de experiencias significativas para los visitantes, transformando así no solo el concepto de centro comercial, sino también la forma en que las ciudades mexicanas viven y se desarrollan.