5 pasos para la automatización de edificaciones
La domótica es cada vez más utilizada tanto por el ahorro en el mantenimiento de un edificio (25% según Schneider Electric) como por la plusvalía que puede generar para el inmueble (cerca de 20% sobre la renta pagada por los inquilinos, según la misma compañía).
Hoy en día cerca de 4.5 millones de m2 de edificios clases A y A+ en la Ciudad de México ‘nacen’ automatizados; no obstante, cerca de 3 millones de m2 de edificios B y C siguen sin poseer este tipo de sistema, señala Jorge Hagg, el Director de Desarrollo de Negocio de Edificación de Schneider Electric.
De acuerdo con el Instituto Mexicano del Edificio Inteligente (IMEI), existen cinco premisas que deben de cumplirse para que un edificio sea considerado dentro de esa categoría: economía, flexibilidad, prevención, predicción, y máxima seguridad.
Para alcanzar estos estándares, los expertos recomiendan seguir algunos pasos que, en la mayoría de los casos, evitan la insatisfacción del usuario y problemas en los sistemas:
1. Conocer la vocación de la construcción. Es decir, para qué se va a utilizar o quién la habitará. De acuerdo con este punto, existen dos clases de edificaciones: Corporativas: una sola filosofía y una sola empresa; y especulativas: donde habita más de una compañía.
2. Tomar en cuenta que ‘para ahorrar hay que invertir’. Y es que el costo de automatizar puede elevar el total de la construcción en hasta 25%, de acuerdo con Maribel Pacheco, directora de KNX, empresa especializada en estándares de automatización a nivel mundial.
3. Equipamiento. Para contratar a proveedores de sistemas, Schneider Electric aconseja tomar en cuenta su trayectoria, los años que tienen de presencia, la solidez de su cadena de distribución y sus aliados comerciales.
4. Integración de sistemas. “Cada uno de los fabricantes debe tener una línea de productos que hablen el mismo idioma, es decir, que posean el mismo protocolo de comunicación”, explica Pacheco y agrega que por ello, es necesario apoyarse en una empresa que pueda interconectar todos los sistemas: sean de levadores, alarmas, incendios, bombeo de líquido, iluminación, audio y video, entre otros.
5. Contar con un buen programa de mantenimiento. En promedio, las generaciones de sistemas de automatización cambian cada siete años, por lo que es necesario asegurarse de que siguen siendo compatibles. “Las instalaciones de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) ya van en su tercera generación de software y la segunda de hardware, pero todos los dispositivos de campo siguen operando y comunicándose con el mismo protocolo”, ejemplifica Hagg.
Los dueños de edificaciones sin automatizar pueden tener dudas acerca de la instrumentación de sistemas, ya que, de acuerdo con Schneider Electric, su instalación cuesta entre 10 y 15% más que en un edificio automatizado desde su concepción.
Sin embargo, el procedimiento sigue siendo rentable, ya que de acuerdo con Pachecho “el ahorro final, en especial en sistemas como el de aire acondicionado, puede ser de hasta 80%”.