La fuerza del barrio
La iniciativa denominada 'Caminando en mi barrio' ha pavimentado alrededor de 60 m2 de banquetas en la colonia El Nejayote, en la ciudad de Monterrey, con trencadís, una técnica catalana que consiste en la aplicación artesanal de piezas pequeñas de mosaicos cerámicos (en este caso, de reúso) para lograr coloridas imágenes figurativas.
Esta iniciativa es una propuesta de Heriberto García Martínez, vecino y coordinador del programa, en colaboración con el colectivo Al Mural, dirigido por Lucero Montes, diseñadora industrial por la Facultad de Arquitectura de la Universidad Autónoma de Nuevo León, los colonos y algunos entusiastas externos que se sumaron a las tareas de mejora.
Según el movimiento, uno de los motivos para realizar el proyecto fue la decadencia y el gran descuido arquitectónico por la falta de armonía entre las viviendas y los edificios comerciales. Pero más que por los valores plásticos y estéticos, la importancia de 'Caminando en mi barrio' radica en que generó un sentido de vecindad y de apoyo comunitario, valores que se conjuntaron para beneficio urbano y social, señala García Martínez. “Somos ciudadanos capaces de responsabilizarnos de nuestro entorno y habitar con respeto la ciudad”.
Eduardo Quintanilla, miembro activo de 'Caminando en mi barrio', comenta que “el éxito del proyecto en el Barrio del Nejayote reside en que es espontáneo, no es auspiciado por organizaciones de planeación urbana ni con una visión política; es trabajo de vecinos y amigos”.
Inició con unas obras para la vivienda de Heriberto, agrega; “de ahí decidieron arreglar la banqueta de una casa abandonada en donde dejaban mucha basura, luego invitaron a artistas locales a participar en el diseño, se realizaron mejoras en la técnica de trabajo y se han ido consiguiendo apoyos para obtener material”.
Cortesía Colectivo Caminando en mi Barrio