Construyen templo para las tres grandes religiones
Reunir a judíos, cristianos y musulmanes en un mismo espacio será posible con la edificación de la Casa de la Oración y el Aprendizaje (Bet-und Lehrhaus, en alemán), en Berlín.
El templo triteísta busca ser ejemplo de tolerancia en la capital alemana, una ciudad con casi 470,000 inmigrantes provenientes de 190 países y que representan 13% de la población.
El diseño arquitectónico, del despacho Kuehn Malvezzi, es "una especie de accidente urbano (...). Atrae la atención, se percibe monumental y muy abierto.
"A lo lejos se reconocen distintos espacios, dentro hay orientaciones variadas: la sinagoga hacia Jerusalén y la mezquita hacia la Meca", explica a Obras la arquitecta Simona Malvezzi.
En la fachada, patrones inspirados en las tipografías de cada creencia identifican los espacios de oración, articulados por un domo que corona el salón central, destinado a eventos culturales.
La ubicación del templo, en la plaza Petriplatz, en el centro de la capital alemana, también es simbólica.
De 1964 a 2007 fue un estacionamiento, pero su aura emocional se remonta al siglo XII, cuando se construyó el primero de los tres edificios que albergarían la Iglesia de San Pedro. El último recinto, construido entre 1847 y 1853, fue afectado por la Segunda Guerra Mundial y demolido por el comunismo en 1964.
Por este pasado, el nuevo inmueble también convive con una excavación arqueológica para recuperar vestigios.
El padre jesuita Gonzalo Balderas, experto en religiones, subraya que "es una oportunidad para que estas religiones encuentren lo mucho que tienen en común y acaben con prejuicios sobre cada una".
El proyecto, auspiciado por la Asociación Bet-und Lehrhaus Petriplatz, busca crear un espacio de convivencia sin importar la religión.
