Foto Museo Cuatro caminos, un ejemplo de acupuntura urbana
El FotoMuseo Cuatro Caminos (FMCC), desarrollado por Mauricio Rocha Iturbide, se ubica en lo que fue una antigua fábrica de plásticos a 50 metros del paradero de la estación del metro Cuatro Caminos.
La intervención implicó la remodelación de la nave industrial original, así como la creación de nuevos espacios y se materializó a través de fondos privados de la Fundación Pedro Meyer —asociación civil para la difusión y educación en torno a la imagen digital— y gracias a un apoyo económico del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes.
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El proyecto se empezó a trabajar en 2012 a partir de la situación urbana del inmueble, factor determinante dado que la zona es una de las de mayor crecimiento de la Ciudad de México, sobre todo con la reciente apertura del centro comercial Toreo Central y la próxima conclusión del ETRAM Cuatro Caminos.
La fachada es sobria, de muros ciegos con aplicaciones de vitroblock. Al interior, el programa arquitectónico se desarrolla en más de 5,000 metros cuadrados y cuenta con tres galerías de exhibición, cinco salones para impartir clases, un auditorio para 150 personas, cafetería, tiendas, restaurante, terraza y estacionamiento.
Durante la inauguración, el pasado sábado 5 de septiembre, el arquitecto Rocha habló de la importancia de rescatar la infraestructura existente y de "hacer acupuntura hacia la ciudades".
Dijo estar convencido de que "con inventiva y creatividad podemos lograr más de los espacios que pensamos", fuera de "la arquitectura de elefantes blancos", pues puede construirse "cultura desde la inteligencia".
Rocha enfatizó en la importancia que el trabajo multidisciplinario tiene en la realización de una tipología de museo. Para el FMCC, taller de arquitectura (Mauricio Rocha + Gabriela Carrillo) colaboró con curadores, fotógrafos y museógrafos, entre otros.
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"El FotoMuseo llena un espacio en dos sentidos", dijo Rafael Tovar y de Teresa, presidente de Conaculta, primero, porque "es el más grande después de la Fototeca Nacional", y segundo, porque "ocupa un espacio geográfico donde no hay oferta cultural".
Con sus muros de concreto aparente, vigas de acero expuestas, pisos de concreto pulido y grandes tragaluces (horizontales y dientes de sierra), el FMCC espera tener gran aceptación por parte del público y promete albergar exposiciones lúdicas, creativas y fotografiables, así como sitios de experimentación para la discusión, el análisis y la exploración sobre los nuevos paradigmas de la imagen hoy.
