La propuesta de ZD+A + Iñaki Echeverría para hacer vivienda social
Casa Tala es la propuesta del despacho ZD+A en colaboración con Iñaki Echeverría para hacer vivienda social escalable capaz de crear ciudad.
El proyecto surgió del concurso Del territorio al habitante del Infonavit, el cual invitó a generar una propuesta de vivienda escalable en México a partir de un estudio de sitio partir de un análisis de sitio, permitiendo reinterpretar la vivienda desde una perspectiva local.
Ochenta despachos, nacionales e internacionales, fueron convocados a llevar a cabo su propuesta de autoproducción asistida.
Casa Tala busca que la arquitectura se vuelva a integrar a la producción de viviendas de interés social en México, luego que por más de tres décadas se ha seguido un modelo que da prioridad a la construcción del mayor número de unidades por el menor costo posible.
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Este esquema deja de lado el objetivo de integrar comunidades y crear ciudad, explica la memoria descriptiva del proyecto.
Por lo tanto, al integrar de nuevo la arquitectura, "la responsabilidad del arquitecto será, a partir del diseño, pensar en viviendas donde predominen la belleza, la funcionalidad y el aprovechamiento de recursos (espacio, territorio, energía) para generar ciudades, y con éstas, calidad de vida para sus habitantes", de acuerdo con el documento.
"Construir viviendas de interés social no debe ser simplemente dar techo a miles de personas –eso es un refugio–; deben tomarse en cuenta todas las aristas que dan forma a una ciudad: la accesibilidad a servicios, la movilidad, la vida familiar, los espacios verdes, la creación de áreas comunes, la oferta cultural y de esparcimiento (...) Debe priorizarse de fondo la movilidad económica, social y cultural que existe en las ciudades, de las que la vivienda es un elemento sustancial.
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El proyecto
La propuesta Casa Tala se basa en un módulo fabricado en lámina aislante, triplay y concreto.
Busca el aprovechamiento de casas y lotes baldíos en existentes en la zona central del sitio, pero también en la creación de nuevas unidades en la periferia.
En el caso de las viviendas existentes propone mejorarlas, ampliarlas y unificarlas por medio de la aplicación de un módulo sobre las casas a manera de primer piso. Plantea aprovechar los baldíos existentes para incrementar el espacio público abierto; en especial las áreas verdes y las vías peatonales.
En la periferia propone una lotificación nueva donde se asigne 57% del área desarrollada a espacios públicos abiertos, lo que superaría la recomendación de la ONU (Naciones Unidas) de 45 por ciento. También aumenta la recomendación de áreas verdes de 15% a 18 por ciento.
Solo 22% se destina al rodamiento vehicular y 8% a estacionamiento.
