El nuevo Estadio Borregos del Tec también tiene una misión urbana
CIUDAD DE MÉXICO. El nuevo Estadio Borregos del Tecnológico de Monterrey, además de impulsar y arropar eventos deportivos y culturales de su comunidad, busca integrar a la ciudadanía a través de la flexibilidad y funcionalidad.
El estadio forma parte del Centro Deportivo Borregos, un complejo de instalaciones deportivas de 14 hectáreas que tiene como finalidad desarrollar las capacidades físico-atléticas de su comunidad.
El Centro forma parte de los proyectos de DistritoTec, una iniciativa de regeneración urbana que se rige bajo tres ejes: evolución del campus Monterrey, integración del ecosistema de innovación, investigación y emprendimiento, así como la mejora del entorno urbano.
"El espacio es una infraestructura diseñada, concebida y ejecutada para hospedar actividades deportivas y culturales del Tec; sin embargo, tiene una función pública, ya que en él se van a programar eventos en los que todo el público en general va a estar invitado", compartió José Antonio Torre, director de urbanismo ciudadano del Tecnológico de Monterrey en entrevista con Tec Review.
El recinto, que hace sinergia con el Modelo Educativo TEC21, al impulsar desarrollo de talento estudiantil, tiene una capacidad de 10,000 personas. Cuenta con ocho torres de iluminación LED, cancha con pasto de monofilamento de 5.7, una pantalla de 10×8 metros y gimnasio, entre otras características e instalaciones.
Será testigo de eventos como partidos, exposiciones, conciertos y eventos culturales que podrán disfrutar tanto la comunidad interna y como externa del Tecnológico.
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El urbanismo y el diseño para la integración
Para lograr la misión de transformar los espacios de la institución e impactar de forma positiva a las 24 colonias que le rodean, el Tec ha adoptado ciertos criterios de urbanismo y diseño en sus proyectos.
"Uno de los criterios que se han adoptado es el de funcionalidad de los espacios, los cuales que vienen a resolver una necesidad, a agregar valor a la misión del Tec (…). Otro es flexibilidad, cada vez estamos construyendo menos espacios unifuncionales, el estadio es un ejemplo, ya que en éste se llevarán a cabo gran variedad de eventos", explicó Torres.
"Otro criterio es sobre los espacios que facilitan la convicción humana, que motivan el encuentro, que nos hagan visibles los unos a los otros; un ejemplo es la nuevo biblioteca del Tec, que destaca por ser transparente, cuando tú estás fuera puedes ver lo que ocurre dentro de ella, eso te invita a entrar", señaló.
Con la finalidad de que la ciudadanía participe, haga sinergia y se beneficie con el nuevo espacio, se construyeron la Plaza Borregos y Plaza Deportistas, las cuales agregan 4,800 metros cuadrados del espacio del Tec que se comparte con el público.
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"El principio de visibilidad también lo aplicamos en el estadio al hacer visible desde la calle lo que pasa adentro del recinto, lo que invita a observar y conectar con otras personas. Las plazas que hicimos en el estadio son esos espacios que invitan al encuentro y a la convivencia".
Con relación a la transformación urbana, también se trabajó en la intervención de 24,000 metros cuadrados de la calle completa García Roel y la calle Nogales, así como en más de 5,000 metros cuadrados de rehabilitación de banquetas de los alrededores, un trabajo que destaca por su accesibilidad universal. Se instalaron más de 100 luminarias y se plantaron aproximaron 350 árboles.
"Cuando hablamos del estadio generalmente se piensa en el edificio. Hay que entender que está rodeado de calles, plazas, espacios que lo complementan, pero que también lo hacen más valioso", recalcó el director de urbanismo ciudadano del Tec.
