Covid acelera robotización en las industrias
En lo que toca al sector industrial Rafael McCadden, director Industrial y Logística, de Colliers International, dijo a Obras que hay una tendencia a la que le llaman low touch o don’t touch, que consiste en garantizar que haya el menor contacto humano posible con los productos, en el trayecto entre productor y consumidor final, “por eso la automatización se está dando tanto en la manufactura como en la logística”, y parte de la consigna de que “entre menos contacto haya con los productos más seguridad hay de que no existan contagios”.
Para McCadden la tecnología es “un factor importante de aceleración del cambio que se está dando hacia la robotización, Ya tenemos la tecnología y el coronavirus está siendo un detonador muy importante hacia este cambio”, el que además repercute en el diseño de naves industriales con mayor altura por la robotización y automatización. “La pandemia ha sido un catalizador que está acelerando la modernización hacia la industria 4.0”.
En entrevista con Obras Caroline Hoarau, directora de la División de automatización industrial de Schneider, mencionó que de vuelta a la nueva normalidad “Para evitar tocar cosas, hay muchos botones inalámbricos que se puede presionar con el codo o con el pie. Y admitió que sí existe un “replanteamiento de cómo disparar la señal evitando el uso de la mano”.
Pone por ejemplo el tema de los torniquetes de acceso que ahora podrían ser reemplazados por torretas que ofrecen la posibilidad de comunicarse con luces infrarrojas para detectar temperaturas.
Caroline Hoarau destacó, sobre todo, el uso de software que permite a nivel de la planta industrial tener una especie de control remoto de los activos. “Como compañía en general estamos apuntando al desarrollo de la tecnología EcoStruxure Secure Connect Advisor porque permite no depender de que alguien venga a visitar la planta para resolver un problema de mantenimiento, y que se resuelva vía remota, cumpliendo con el tema de distanciamiento social”.
Explicó que en sus plantas inteligentes emplean la tecnología EcoStruxure como industria 4.0, basada en una serie de sensores en ciertos puntos, donde recaban información, y usan el internet de las cosas para llevar esos datos a análisis con el fin de tomar una buena decisión. El tema es captar todos esos datos para tomar decisiones más informadas, en tiempo real, conectados a alarmas y algoritmos que permiten ser predictivos y exactos para evitar parar la planta.
En el plano residencial. Son muchas las opciones de domótica que ya existían, antes de la pandemia, y ahora cobran fuerza. LG eletronics es uno de los proveedores de sistemas de hogares inteligentes conectados al Internet de las cosas (IoT), para conectar electrodomésticos, iluminación, calefacción, aire acondicionado, seguridad y otros dispositivos. La tecnología que oferta “recopila datos y los aplica a la medición automática de las condiciones del hogar, la administración de los electrodomésticos, el control del acceso al hogar, entre muchas otras funciones”.
Las opciones para no tocar son tan amplias como la creatividad lo permita, pues la tecnología parece estar dando manga ancha para hacer las ideas realidad.