De ahí que la propuesta fuera crear un sistema de parques y espacios verdes que dará paso a más intervenciones en una segunda etapa en calles aledañas, incluso en la Plaza de Mártires (zócalo de la ciudad).
“Vimos la oportunidad de transformar y partir de un nuevo paradigma de intervención de un centro histórico y hacer que se convierta en un espacio concentrador de actividad y conciencia medioambiental.”
A detalle
El polígono principal, que une al Palacio de Gobierno y al Cosmovitral, está conformado por una sección peatonal a nivel de calle con árboles, vegetación y mobiliario urbano, así como una zona subterránea que alberga una fuente que emula la niebla característica de la entidad, fuentes interactivas y juegos infantiles, incluidos para niños con discapacidad.
El propósito de realizar el espacio deprimido fue brindar mayor contención y seguridad a los menores visitantes, quienes podrán jugar sin el riesgo del tránsito vehicular. Además, este espacio contará con equipamiento de videovigilancia.
El parque es totalmente accesible y con materiales de alta durabilidad. Por ejemplo, los pavimentos de los andadores tienen ingeniería que brinda una durabilidad de 100 años, además de ser ecológicos, antigraffiti y antimanchas, precisa Víctor Márquez.
En cuanto al efecto de ‘rampear’ el parque hacia dentro y producir un centro, el autor del Parque Metropolitano La Mexicana detalla que “previendo que en el lugar habrá actividad humana y para ser respetuosos de fachadas históricas, hicimos que la nueva construcción fuera subterránea, en donde habrá una zona de locales comerciales, cafés y restaurantes, servicios comunitarios y salas interactivas. Hacia el exterior el parque se vuelve a conectar con otras plazas urbanas que vuelven a darle el carácter de público, y luego se conecta con la iglesia del Carmen (que data de finales del siglo XVII) y con otro parque en donde estará el planetario”.
Además del planetario de 2,700 m2 y equipado con un domo de inmersión digital, habrá un centro de innovación con salas para exhibiciones, conferencias, talleres, eventos culturales y conciertos, además de una zona comercial y dos niveles de estacionamientos.
Por todo ello, este conjunto de parques (que requirió un monto aproximado de inversión de 300 millones de pesos) servirá de pretexto para que los visitantes pasen un día agradable en un lugar con acceso a cultura, ciencia y gastronomía, resalta Márquez.
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