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Reconocimiento ODA 2020 a obra social

Obra del Año destaca el trabajo realizado por empresas para apoyar en la contingencia sanitaria provocada por la pandemia de coronavirus.
lun 28 diciembre 2020 05:00 AM
Centro Citibanamex
Aspectos de la conversión del Centro Citibanamex en una unidad temporal hospitalaria.

En pocas semanas, el mundo entero se transformó. La pandemia de coronavirus, presuntamente surgida en China en diciembre de 2019, se esparció por todo el mundo y cambió la manera en la que vive y se relaciona la sociedad.

Gobiernos, organizaciones y empresas han buscado la manera de ayudar a tratar a las personas contagiadas y apoyar al personal médico de salud que, a falta de una vacuna, dedica sus esfuerzos en aliviar los síntomas de la enfermedad en quienes la sufren para lograr que sobrevivan.

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En todo el mundo se desplegaron iniciativas sin ánimo de lucro en las que se incluyeron la modificación de espacios o instalaciones médicas para dar mayor capacidad de atención al sector médico, por lo que en Obra del Año 2020 se reconoce a algunas de estas propuestas realizadas en México, que involucra la reconfiguración o adaptación de lugares para cumplir con las necesidades que han surgido durante la pandemia sanitaria.

Una de ellas es la configuración del Centro Citibanamex en la Ciudad de México. El centro de eventos más grande de América Latina se convirtió en abril en una unidad temporal de atención al COVID-19 que hasta noviembre ha atendido a más de 3,400 pacientes y se ha evaluado a 5,700 personas antes de presentar síntomas graves. El esfuerzo ha significado el ahorro de 37,000 camas de pacientes en hospitales permanentes.

Para lograrlo, el grupo Sumamos X México, formado por Fundación Carlos Slim, Fundación Telmex-Telcel, Fundación Inbursa, CIE (Corporación Interamericana de Entretenimiento), Walmart, Bimbo, Barcel, Fundación Sertull, Citibanamex, Fundación Alfredo Harp Helú, Fundación Coca Cola, Coca Cola FEMSA, CODERE, HSBC, Coppel, Grupo Infra y Takeda; con coordinación de las autoridades de salud de la Ciudad de México y la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Juntos, en tan sólo 20 días, lograron hacer desde los planos arquitectónicos para la instalación hasta la puesta en operación en los más de 53,000 metros cuadrados del inmueble. La infraestructura hospitalaria contempló 574 camas, áreas de terapia intermedia e intensiva, comedores, dormitorios y baños para personal médico, además de salones de capacitación.

En las zonas de atención a pacientes se instalaron sistemas como lámparas con filtros UV dentro de los ductos de aire acondicionado para disminuir las partículas de COVID-19 y se cumplió con el Código de Instalaciones de Atención Médica NFPA99 para instalar materiales que aminoren riesgos para los pacientes.

Igualmente se implementó el programa TRIAGES, que consiste en módulos de valoraciones para que la población pueda tener una revisión cuando los síntoma aún no son graves. con la intención de canalizarlos y evitar un cuadro avanzado de la enfermedad.

Grupo Modelo es otra de las compañías que realizó obras para ayudar durante la contingencia sanitaria. La empresa donó la construcción de un Módulo Hospitalario Temporal en Tijuana, Baja California, para atender a pacientes contagiados de coronavirus en el Hospital General Regional No. 1 del Instituto Meicano del Seguro Social (IMSS), que apoyaron en el proyecto arquitectónico y equipamiento.

La unidad contiene áreas de estabilización, hospitalización con capacidad para 60 camas y un espacio de servicios médicos, en donde personal de salud con especialidad en enfermedades respiratorias se encarga de la operación.

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Ikea Foundation, compañía sueca que en octubre de estre 2020 comenzó a operar en México a través de ventas online, en colaboración con la organización Beter Shelter, donó 50 refugios temporales en el Estado de México y la capital del país para que fueran operados en atención a necesidades específicas de la zona. Las unidades consisten en un modelo para armar que puede ser usado como sitio de descanso para profesionales de la salud, consultorios o módulos de primer contacto para personas contagiadas.

La estructura fue entregada en dos paquetes planos que contienen todas las herramientas necesarias para su instalación, que requiere a sólo cuatro personas para completar el armado en máximo seis horas, sin uso de electricidad.

Cada uno mide 17.5 metros cuadrados y está formado de acero que se ancla al suelo, también cuenta con un revestimiento de paneles de plástico semi ligero que puede ser cortado para adaptaciones. recibe energía a través de un panel solar, además de ventilación pasiva y puerta con seguro.

Con estas iniciativas el diseño demuestra, más que nunca, su aporte a la sociedad en crisis como la que se vive en la actualidad.

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