No es secreto que Tabasco, estado de donde es oriundo el presidente Andrés Manuel López Obrador, es uno de los lugares en los que más se han enfocado recursos para la construcción de infraestructura y revitalización del espacio público.
Así es el polideportivo de alto rendimiento y estadio Manuel Vargas Izquierdo
En Tabasco se construyó un nuevo espacio para practicar deportes. Es el segundo estado con más obras de la Sedatu este sexenio.
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A través del Programa de Mejoramiento Urbano (PDU), la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) ha iniciado 72 obras en el sexenio con una inversión de 5,505 millones de pesos. La última de ellas es una de las más grandes por sus dimensiones: el polideportivo de alto rendimiento y estadio Manuel Vargas Izquierdo.
El edificio, visto a la distancia, parece una estereotomía de madera. Como si los creadores, CCA Centro de Colaboración Arquitectónica y Bernardo Quinzaños, hubieran armado una maqueta como rompecabezas en tamaño real y la hayan instalado en Jalpa de Méndez, municipio en donde se encuentra.
Tras su apariencia ligera, se revela una estructura robusta que permite practicar por lo menos seis deportes distintos. El polideportivo alberga canchas de baloncesto y voleibol, así como salones destinados a la práctica de artes marciales como karate y judo, mientras que en el espacio exterior, se han incorporado un skate park y una zona de juegos para niños.
En términos estructurales, se ha optado por el uso de cartelas —una especie de tarjetas— de concreto aparente que soportan una estructura de armaduras de acero, creando áreas sombreadas y espacios abiertos que permiten el uso cómodo de las instalaciones independientemente del clima.
El Estadio Manuel Vargas Izquierdo, en particular, incluye diez paraguas de concreto aparente, sostenidos por tensores tubulares que proporcionan sombra a las gradas. Las rampas laterales del estadio han sido diseñadas para ofrecer acceso universal, integrando el concepto de inclusión en la estructura.
El material predominante en el complejo es un concreto de tonalidad naranja, evocando la cantera regional y adaptándose al clima local al reflejar el calor y prevenir la acumulación de humedad. Este color y textura, le da además una apariencia más natural y relajada, similar a la que provoca la madera sin entintar.
El complejo deportivo de Jalpa de Méndez no sólo se distingue en Tabasco por su diseño arquitectónico, sino también por sus soluciones sostenibles. La estructura permite una ventilación natural cruzada, optimizando la circulación del aire y reduciendo la necesidad de sistemas artificiales para el clima. Además, se han implementado sistemas de recolección y captación de aguas pluviales.
La construcción del Polideportivo de Alto Rendimiento y Estadio Manuel Vargas Izquierdo implicó varios retos, desde la elección de materiales adecuados para el clima de Tabasco hasta la integración de prácticas sostenibles en el diseño arquitectónico.
La selección del concreto naranja, por ejemplo, no solo responde a una intención estética, sino también a la necesidad de reflejar el calor y evitar la acumulación de humedad, factores críticos en un entorno con condiciones climáticas variables.
En Jalpa de Mendez se construyeron otras tres obras a través del PMU: el Centro de Desarrollo Comunitario La Guadalupe y el Parque Recreativo el Campestre, iniciados en 2021.
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