'Plan de Infraestructura, posible solución al rezago en inversión'

México tiene un rezago en inversión de infraestructura de 15 a 20 años por lo que de manejarse bien la inversión de 7.7 billones de pesos (bdp) destinados al Programa Nacional de Infraestructura 2014-2018, puede tener efectos positivos, opina José Luis de la Cruz, Director General del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC).

A pesar de que es "deseable" tener una cantidad de inversión mayor para el Programa anunciado este lunes por el presidente Enrique Peña Nieto, la meta inicial de este plan es revertir la tendencia que en años previos se había tenido en el debilitamiento del tema de infraestructura.

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“Hay una urgencia porque el país genere proyectos de infraestructura, lo deseable es que se presenten lo antes posible, y que se hayan presentado es positivo. Se tiene que actuar con mucha velocidad en el desarrollo de infraestructura del país, que requiere de una planeación delicada y que están tratando de reimpulsar en este momento”, agrega el director del Centro de Investigación en Economía y Negocios del ITESM, Campus Estado de México en entrevista con Obras.

El gasto programado de inversión representa cerca de 40% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional de un año, cuyo impacto se estima en un crecimiento de 1.8 a 2% adicionales al crecimiento del año, es decir, que se espera que con esto se alcance un crecimiento de alrededor de 4.5% en gasto de infraestructura.

“Es positivo, sin embargo el país debería de estar creciendo a tasas superiores de 5%; en los últimos años ha sido de 2.5%, por lo que este programa contribuye a un aumento que casi duplique este PIB de los últimos años”, agrega el especialista.

Asimismo, explicó que de estos 7.7 bdp, alrededor de un 25-30% es gasto nuevo, mucho orientado al sector energético, al de comunicaciones y transportes, y al de vivienda.

“Se le esta agregando un gasto que ya se está ejecutando, evidentemente como se quiere hacer sinergia con los privados, los privados ya ejecutan parte de esta inversión”, agregó.

Sin embargo, De la Cruz reconoce que el desafío de este programa está en que se garantice que el valor agregado de los proyectos contemplados sea superior al que se ha registrado en años previstos para alcanzar un gasto en inversión positivo superior a 3% y el gasto en general, superior a 2%.

Lo anterior debido a que durante el sexenio de Felipe Calderón, el valor agregado del gasto público en general fue de 0.0% y en sectores como el del petróleo fue de -1% en promedio del sexenio.

¿Qué necesita el Plan de Infraestructura para que funcione?

El problema del gasto de gobierno es que el impacto de valor agregado generado no es el que se necesita, por lo que la administración pública debe de garantizar que: 

- Los recursos se ejecuten en tiempo y en forma, que no exista desviación en los programas y en los proyectos para los que se está destinando.

- Se tenga una transparencia financiera, considerando los resultados que se van a dar por los proyectos que se estén aprobando. 

- Se garantice un desarrollo equilibrado en el país.

- Que el sector energético, que es el demanda mayor peso, se vuelva una columna vertebral de desarrollo industrial, es decir, que se garantice que los costos de energía disminuyan (luz, gas, electricidad, etc.)

- Los asociaciones o vínculos que se van a hacer con el sector privado estén enmarcados en una transparencia y que el recurso sea bien administrado.

- Para que este proyecto tenga Incidencia sobre la economía nacional, debe haber una garantía desde el inicio de la construcción de estos proyectos, para que muchos de los insumos provengan de empresa nacionales, de otra manera la importación se va a llevar la mayor parte de los recursos de los 7.7 billones.

Para el académico Miguel Ángel Corro Manrique, Director del Departamento de Economía del ITESM Santa Fe, los 7.7 bdp es una cantidad insuficiente, tomando en cuenta que el gasto público federal para este año es de 4.6 billones de pesos.

Sin embargo, reconoce que es una inversión que no se había destinado en años anteriores, por lo que implicará un beneficio inmediato y de mediano plazo para la población.

“Finalmente es un generador muy importante de empleo, en consecuencia, cualquier programa nacional de infraestructura como el que presentó el presidente Peña por supuesto ya trae implícito un beneficio inmediato en los diversos sectores, el impacto más importante está en casi 3.8 billones de pesos destinados al sector energético”, puntualoizó Corro Manrique en entrevista con Obras. 

Un programa "histórico"

El PNF 2014-2018 es "histórico" en los montos de inversión por parte de la iniciativa privada, asegura el Director de Infraestructura de la consultora KPMG en México, Leonardo Estévez.

"Ésta tenía alrededor de un 25% de la inversión total en infraestructura, y en este plan se está contemplando un 40%, lo cual veo muy adecuado”, señala en entrevista con Obras. 

De acuerdo con Banco Santander, el déficit de inversión en Infraestructura en el país se acerca a los 90 billones de dólares, no obstante, Estévez se muestra optimista respecto a los montos que contempla este PNI (que en total suman 7.7 billones de pesos), y lo califica como un plan “ambicioso”.

Estévez llama a concretar las leyes secundarias, ya que, desde su punto de vista, éstas representan uno de los retos del PNI, entre muchos otros.

"También tenemos que optimizar los procesos de asignación y contratación, incluyendo la transparencia de estas asignaciones. Debemos aplicar los recursos presupuestales en tiempo y forma, así como hacer una buena repartición de riesgos entre iniciativa privada y pública, afirma.