Las condiciones del INAH para construir el Metrobús en Reforma
Las obras del Metrobús sobre la avenida Paseo de la Reforma en la Ciudad de México fueron ya permitidas por el juez que ordenó suspenderlas a principios de junio; esto una vez que el Instituto Nacional de Antropología e Historia diera la autorización al proyecto, aunque con algunas condiciones como minimizar la publicidad y restaurar varios monumentos.
El 9 de junio el juez Octavo de Distrito en Materia Administrativa, Fernando Silva García, suspendió la construcción al no existir una autorización del INAH a todo el proyecto y no conocer por lo tanto si se podían realizar trabajos en zonas donde hay monumentos históricos.
Esto, como parte del juicio de amparo 841/2017, promovido por por la Academia Mexicana de Derecho Ambiental (AMDA) contra autoridades de la Ciudad de México.
Los trabajos iniciaron sin la autorización, pero el 19 de junio pasado el INAH la emitió, por lo que el juez resolvió el recurso de revisión de la suspensión a favor del Gobierno de la Ciudad de México.
Lee: El Metrobús Reforma aún no se autoriza al 100%, responde el INAH
El jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, ha considerado díficil que la decisión sea impugnada, pues cuentan con todas las pruebas a favor. También aclaró que el litigio continuaba, pues solo se resolvió lo concerniente al incidente de revocación presentado, pero confió en que el fallo final también les será favorable.
La mañana de este jueves, en entrevista con Radiofórmula, de la Academia Mexicana de Derecho Ambiental, dijo también que la resolución del juez es provisional para no dañar en exceso a la ciudadanía por el paro de las obras mientras se resuelve el litigio de fondo.
"Estamos en espera de la sentencia definitiva", dijo el presidente de la AMDA, Ramón Ojeda, y advirtió que dado que se han ido acumulando pruebas, "no veo que la libre el Gobierno de la Ciudad de México".
"Esto no se acaba hasta que se acaba", dijo y agregó que en materia judicial "siempre hay sorpresas".
En tanto, se reanudaron ya los trabajos de construcción, que deben respetar los lineamientos del Instituto de Antropología
Las condiciones que el INAH puso al Metrobús Línea 7
Las impuestas desde un inicio y que se conocían
- Mantener inalterable el trazo de Paseo de la Reforma, en el tramos que corresponde al Instituto; respetando camellones central y lateral, jardines, arroyos y banquetas.
- El Metrobús circulará por el carrill derecho del arroyo central
- Los autobúses serán abordados a nivel de banqueta
- Las estaciones no serán confinados, sino estructuras ligeras para sostener cubieras, mamparas y bancos de espera
- En tramos competencia del INAH se evitará retirar árboles, para lo que se deberá modular estaciones y paraderos
- La localización de la estaciones en cada sentido será revisada
Lee más: 5 argumentos en favor del Metrobús en Reforma
Las que añadió posteriormente
- Proteger el espacio procesional histórico de la Calzada de los Misterios y restaurar los 15 monumentos votivos en la banqueta oriente, tanto los históricos como los restituidos en el siglo XX.
- Corregir ubicación de estaciones que comprometían la libre apreciación de los monumentos, esculturas y jarrones históricos.
- El diseño de las estaciones será transparente, abierto y no protagónico
- Modificar mástiles en la señalética de cada estación; en su lugar se colocarán estelas de baja altura sin propaganda comercial
- La delimitación del carril exclusivo deberá resolverse con botones metálicos discretos y respetuosos del entorno.
- No se construirán bahías para autobuses
Lee también: Metrobús de Reforma desordena el entorno, dice cuerpo de arquitectos
El plan conjunto de imagen urbana y patrimonio histórico
- Retirar y restringir elementos publicitarios en las zonas patrimoniales restringidas
- Retirar mobiliario urbano irregular o innecesario: antiguos parabuses, quioscos de periódicos y venta de flores, así como puestos de comercio informal
- Elaborar proyectos de intervención para lo 15 monumentos votivos de Calzada de los Misterios, los conjuntos escultóricos, esculturas individuales, pedestales, jarrones, fuentes y bancas de cantera para su limpieza y restauración, bajo la supervisión del INAH y del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) y la operación del Gobierno de la Ciudad de México.
