Casa de los 7 días
La Casa de los 7 días es una secuencia de marcos que representan el proceso interminable y creativo de los propietarios.
Debe su nombre al tiempo que tomó su ensamblaje: siete días continuos para instalar 45 piezas equivalente a siete piezas diarias. Todas las piezas fueron fabricadas en un ambiente controlado con la capacidad de planear y pensar todos los detalles de las casa, lo que permitió ahorrar en tiempo y costo.
Foto: Marcos Betanzos
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Este innovador sistema de construcción, que promueve el construir en serie, implicó hacer cepas para meter tuberías y posteriormente colocar los paneles uno a uno hasta completar toda la casa. A partir de ese punto los detalles de acabados, equipos y ventanas corrieron el proceso natural de la obra y sus imprevistos.
La virtud de esta obra fue edificarla 329 m2 en siete días incluyendo los acabados de muros exteriores, interiores y plafones curvos y planos de concreto aparente con la mezcla desarrollada ex profeso para dar una sutileza de acabado y durabilidad, nunca hubiera sido posible en un sistema tradicional.
Foto: Marcos Betanzos
La prefabricación de las piezas y verificación de todos sus detalles, aun cuando el cliente no tenía las licencias de construcción, permitió abatir tiempos hasta en 80% con su respectivo impacto en el costo.
Es una obra con CERO desperdicio en su proceso de obra prefabricado. La orientación y los aislantes térmicos y acústicos que se instalaron en el interior de los muros le permite ser sumamente eficiente y confortable, aunado a la posibilidad de abrir ventanas y generar circulaciones cruzadas que permiten controlar de manera precisa la temperatura del espacio sin necesidad de elementos mecánicos.
Casa de los 7 días
Ubicación: Atizapán de Zaragoza, Estado de México
Arquitectura: Javier Peláez + Arquitecturame
Superficie : 329 m2
Foto: Marcos Betanzos
