El tren de carga del NAIM deberá comenzar pruebas en febrero

Nota del editor: Esta nota se publicó originalmente en la edición de enero de 2018 de la revista Obras,  El diseño robotizado, ¿enemigo o aliado?, publicada exclusivamente en versión digital; búscala aquí 

La infraestructura del ferrocarril de carga para conectar un centro de acopio de materiales con bancos de tezontle y terrenos del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAICM), que se planea comience pruebas operativas este febrero, requirió una inversión de 1,050 millones de pesos (mdp).

Este tren conectará al aeropuerto por la parte norte y servirá para el acarreo de materiales y la remoción de escombros. Federico Patiño, director general de Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM), informó que se trata de una vía férrea conectada a partir del ferrocarril México-Veracruz, con una longitud de 12 kilómetros, para suministrar materiales pétreos dentro del Nuevo Aeropuerto que se emplearán en la construcción de pistas y plataformas.

Al ser una extensión de la línea ferroviaria que opera Ferrocarril y Terminal del Valle de México (Ferrovalle), esta empresa estuvo a cargo de la construcción que comenzó en diciembre de 2016 y debía haber concluido en enero de 2018.

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Aunque en un inicio se pretendió que fuera una construcción en tiempo récord, las lluvias y las complicaciones para obtener el derecho de vía en algunos municipios influyeron en los tiempos de entrega.

Yuriria Mascott, subsecretaria de Transporte, comenta que a mediados de diciembre faltaba un tramo de vía en el municipio de Nexquipayac y la construcción de un paso a desnivel en la autopista Pirámides-Texcoco, "por lo que para febrero deben comenzar pruebas operativas", asegura.

Erich Wetzel, director general de Ferrocarril y Terminal del Valle de México (Ferrovalle), explica que la adquisición de los derechos de vía fue compleja; no obstante, fueron apoyados por la constructora Pinfra, la cual por su experiencia en el terreno ayudó a agilizar la compra en un tiempo relativamente corto, ya que en ocasiones esta liberación puede tomar de dos o tres años.

"No es fácil negociar porque debes acordar en junta ejidal. El proceso en México para comprar derechos de vía es largo", comenta.

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Dadas las características del terreno del antiguo lago de Texcoco, Wetzel refiere que se requirió de la construcción de una especie de puentes ferroviarios que permitirán la colocación de un sistema para la descarga de los carros del tren. De igual manera, se necesitará un equipo especial de tolvas para la descarga rápida.

De acuerdo con información del GACM, para descargar el material se usará el sistema RUMig 3-4, bandas transportadoras de la empresa Ashross que llegarán hasta la descarga final, y habrá dos centros de acopio para el acarreo del material.

Ferrovalle anunció que prevé la operación con seis trenes, con un estimado de carga de 5,400 toneladas (t) y con la meta de movilizar 97,200 t diarias de materiales, principalmente para la construcción de las pistas, la torre de control y el Edificio Terminal.

Especialistas de la Asociación Mexicana de Ferrocarriles (AMF) consideran que tiene sentido contar con trenes unitarios de más de 10,000 t que lleven de manera eficiente los materiales a la obra, lo cual equivale a la carga de entre 230 y 350 camiones; un beneficio adicional a los costos es que se afectará menos la infraestructura vial.

 

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