El desarrollo positivo, aunque sutil, continúa en la industria de la construcción luego de que en junio fuera considerada una actividad esencial y se reanudaran labores.
Durante agosto, el Indicador de Pedidos de la Construcción de Forecastim (IPC) llegó a los 97.94 puntos, valor aún negativo por estar debajo del 100, umbral que separa el desarrollo positivo del negativo, pero con un ligero incremento de 0.48 ya que durante julio el valor registrado fue de 97.46.
Con la evaluación de agosto se acumulan ocho meses consecutivos en la fase de contracción de la demanda, es decir, debajo de las 100 unidades.
“Como consecuencia de la crisis provocada por el COVID-19, entre abril y julio del presente año los pedidos de la industria registraron el ciclo de menor consumo en la evaluación histórica del IPEC, esto desde enero de 2013”, informó Forecastim.
En junio el indicador llegó a su punto mínimo (97.00) y comenzó su recuperación, aunque aún se mantiene por niveles debajo a los registrados antes de la pandemia.
Los pedidos son una manera de medir el desarrollo del sector, y que representa la demanda de insumos para iniciar obras, y la manera en la que impactará en el resto de las industrias; “la industria de la construcción demanda productos y servicios de distintas actividades de la economía desde insumos directos que se transforman o se instalan en obra, así como una amplia gama de proveedores directos que en conjunto suman más de 300 ramas de la actividad productiva”, informa Forecastim.
El indicador se ha desarrollado de manera similar a otros con los que se mide la industria, como el valor de producción analizado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) que para julio presentó un aumento de 1.1%.
