El peritaje de la empresa DNV determinó que el desplome ocurrió debido a las deficiencias en la colocación de los pernos —en soldaduras, mala colocación e incluso falta de pernos—, por lo que las partes de la estructura comenzaron a funcionar de manera independiente. Esto restó capacidad de carga y deformó el cuerpo que soportaba la estructura horizontal, hasta que finalmente “se quebró”.
Ahora, los aditamentos se enfocarán en evitar que las vigas se pandeen y se le reste carga a los pernos, “para que la estructura continúe funcionando de manera segura a pesar de que hubiera una falla en éstos”, explicó el funcionario.
El reforzamiento del tramo elevado de la Línea 12
El plan consiste en cuatro elementos principales en el tramo metálico de la Línea 12, que mide 6.7 kilómetros:
- La colocación de puntales metálicos inclinados, horizontales o verticales, según el tramo. Es decir, se agregarán equipos de acero que soportarán el peso de las losas. Irán del suelo a la parte más alta de la estructura, con el objetivo de que el recorrido sin soporte de las trabes sea más corto. Al apuntalarse en zonas medias, la resistencia de carga será mayor.
- Conexiones de los puntales a las cimentaciones existentes o a las nuevas cimentaciones, según se requiera.
- Diafragmas metálicos horizontales y verticales: funcionan como un esqueleto en las losas que, junto a las trabes, dan mayor soporte estructural en su interior para evitar la deformación.
- Topes sísmicos auxiliares a los existentes. Es una estructura que se ubica entre el estribo del viaducto elevado y los bloques de concreto y funcionan para “amortiguar” el impacto de los movimientos telúricos.
Los arreglos serán realizados por la empresa Carso, de Carlos Slim, la constructora responsable del tramo elevado de la Línea 12 durante el gobierno de Marcelo Ebrard.
La obra deberá quedar lista en 12 meses, precisó Esteva Medina, por lo que planea que se trabaje en 50 frentes simultáneos para realizar más de 500 acciones de rehabilitación.
