¿Por qué el Tren Maya hizo pruebas a 30 km por hora?

El proyecto se ha visto rodeado de inconformidades por su alto impacto en la biodiversidad de la zona sureste del país. Sin embargo, con la obra civil aún inconclusa en sus 1,500 kilómetros de ruta, dio inicio con las primeras pruebas operativas que comenzaron el 1 y 2 de septiembre de 2023.

Entre los asistentes que estuvieron durante el recorrido se encontraban, el mandatario del país, el gobernador de Yucatán, Mauricio Vila Dosal, la gobernadora de Quintana Roo, Mara Lezama, entre otras personas.

El primer día de prueba, el recorrido se llevó a cabo en los tramos dos y tres, que van desde Campeche hasta Quintana Roo. Mientras el segundo día se realizó la prueba en la Península de Yucatán en donde los vagones Tren Maya se quedaron parados en la comunidad de Yaxcabá, a una media hora de camino hacia Chichén Itzá.

De acuerdo con la página oficial del Tren Maya, este proceso de certificación requiere cubrir un total de 15,000 kilómetros antes de que el tren pueda entrar en servicio comercial.

Tras dar a conocer detalles de las pruebas, en redes sociales se manifestaron dudas por la velocidad del transporte, ya que en el sitio web del Gobierno de México menciona que el tren viajará a una velocidad de 160 kilómetros por hora, mientras que el trayecto se realizó a 30 kilómetros por hora.

Daniel Rodríguez, diseñador industrial especializado en trenes, encargado del diseño de Al Faras, el nombre del tren de Qatar, menciona que para las pruebas de un tren, el proceso abarca aproximadamente un año, se divide en dos categorías fundamentales: las pruebas de certificación del tren y las pruebas de interfaz, que evalúan la interacción entre el tren y la infraestructura.

Pruebas de Certificación del Tren

“El tren es una máquina compleja con numerosos componentes y sistemas que deben ser sometidos a una serie de pruebas exhaustivas”, menciona el experto. Una de las primeras tareas es probar y verificar las distancias necesarias para la aceleración y frenado en diversos puntos de la línea. Hasta que estas distancias sean establecidas, es peligroso operar el tren a velocidades de servicio.

Durante estas pruebas, el tren se mueve en tramos considerados típicos, realizando repetidas pruebas de aceleración y frenado a velocidades reducidas (aproximadamente 40 km/h). Esto se hace para evaluar la respuesta del tren, verificar el funcionamiento de sistemas cruciales como el tren motriz y las baterías, y en algunos casos, evaluar sistemas de frenado regenerativo.

Una medida de seguridad importante es el uso de tanques de agua para simular el peso de los pasajeros, ya que realizar estas pruebas con pasajeros reales sería peligroso. Además, se realizan análisis estructurales dinámicos para evaluar cómo la vibración y las fuerzas durante la aceleración y frenado afectan la estructura del tren. Sensores y computadoras se instalan en el interior del tren para monitorear estas pruebas complejas.

Después de completar estas pruebas y establecer distancias críticas en la línea, se realizan recorridos en tramos a velocidades cercanas a las de servicio. Esto permite evaluar cómo la vía y las curvas afectan el desempeño del tren. También se verifica la rigidez estructural mediante pruebas estáticas con pesos en el armazón.

Pruebas de Interfaz

Estas pruebas son particularmente detalladas cuando tanto el tren como la infraestructura, como vías, señalización, estaciones y viaductos, son nuevos y no han sido probados conjuntamente. Uno de los aspectos fundamentales es asegurarse de que no haya obstáculos en la infraestructura que puedan chocar con el tren. Se utiliza un límite envolvente para garantizar la seguridad.

La recepción y transmisión de señales a través de antenas también se verifica para garantizar que el tren cumpla con las velocidades límite y las distancias de seguridad entre convoyes. Estos sistemas son cruciales para la operación segura del tren y proporcionan información esencial al centro de control sobre la ubicación y velocidad del tren.

Otras pruebas incluyen el monitoreo del desgaste de las ruedas y el mantenimiento general. Además, se capacita a los conductores con la supervisión de instructores, lo que implica conocer el tren, sus sistemas y los protocolos de manejo y mantenimiento, así como procedimientos de emergencia.