La próxima presidenta de México, Claudia Sheinbaum, deberá abordar una serie de retos en materia de infraestructura para impulsar el desarrollo económico y social del país, según indica el Colegio de Ingenieros Civiles de México (CICM).
El sistema hídrico, principal desafío en infraestructura para Claudia Sheinbaum
Entre los desafíos principales y más urgentes se encuentra la situación hídrica que afecta a la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM). Expertos del CICM, como Fernando J. González Villarreal, coordinador técnico de la Red del Agua de la UNAM, y Felipe I. Arreguín Cortés, miembro del Colegio, han señalado la sobreexplotación de los acuíferos en la región.
Esta situación ha provocado hundimientos del suelo de hasta más de 10 metros en algunas áreas, lo que afecta la estabilidad de infraestructuras esenciales. El Sistema Cutzamala, fundamental para el abastecimiento de agua de la capital, presenta un déficit, almacenando el 36.8% de su capacidad útil al 12 de agosto de 2024, por debajo del 64.8% histórico para esa fecha.
Los especialistas del CICM han identificado seis problemáticas clave que la administración entrante deberá considerar:
1. Precipitaciones no uniformes y déficit en el Sistema Cutzamala.
2. Factores como la ubicación geográfica, crecimiento demográfico y cambio climático.
3. Hundimientos del suelo por sobreexplotación de acuíferos.
4. Infraestructura con necesidades de inversión.
5. Conversión de tierras agrícolas debido al crecimiento urbano e industrial.
6. Impacto del cambio climático, particularmente en forma de sequías recurrentes.
Para enfrentar estos retos, el CICM propone la creación de un Sistema de Gestión Integral del Agua para la Cuenca del Valle de México. Este sistema incluiría políticas, programas y acciones diseñadas para abordar los desafíos técnicos, administrativos, financieros, ambientales y sociales que afectan al sistema hídrico regional.
Más allá de la problemática del agua, Cedric Iván Escalante Sauri, subdirector General del Proyecto Baluarte-Presidio-Presa Santa María de la Conagua (Comisión Nacional del Agua), ha señalado otros retos en infraestructura que requerirán atención:
- Construcción de aproximadamente 400,000 cuartos de hotel en los próximos años.
- Edificación de más de un millón de viviendas.
- Construcción de al menos una gran presa.
- Rehabilitación y mantenimiento de 1,350 plantas potabilizadoras.
- Conservación y mantenimiento de más de 400,000 kilómetros de carreteras y caminos.
- Instalación de un estimado de 3,000 kilómetros de vías férreas.
A pesar de estos desafíos, Escalante Sauri también destacó oportunidades en proyectos de infraestructura innovadores. Citó como ejemplos la presa de almacenamiento Santa María en Sinaloa y el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec.
La presa Santa María, concluida en diciembre de 2023, incorporó innovaciones tecnológicas como el uso de geocompuestos en la ataguía y un plinto flotante para distribuir las cargas de la cortina de manera uniforme. Este proyecto se terminó en el plazo previsto y generó ahorros en recursos.
Por su parte, el Corredor Interoceánico representa una plataforma logística multimodal que incluye 1,189 kilómetros de vías férreas, cuatro puertos con capacidad para 300,000 contenedores anuales (con proyección a 1.4 millones), y 12 Polos de Desarrollo para el Bienestar en Oaxaca y Veracruz.
Mauricio Jessurun Solomou, presidente del Consejo Directivo del CICM, resaltó el compromiso del gremio de ingenieros civiles con el desarrollo económico y social del país. Señaló que la colaboración entre profesionales y el gobierno será importante para implementar soluciones a los retos de infraestructura.
El CICM recomienda fortalecer las estructuras institucionales, aumentar los recursos financieros y mejorar el marco jurídico para asegurar una planificación y coordinación efectiva en todo el país. Mediante un esfuerzo conjunto y coordinado, afirman, se podrá trabajar hacia la seguridad hídrica a largo plazo y el desarrollo sostenible de la infraestructura nacional.