Los edificios con jardines contrarrestan altas temperaturas del clima

En las grandes urbes, las sensaciones térmicas pueden resultar abrumadoras debido a las escasas áreas verdes, por ejemplo, la Ciudad de México, que al ser una metrópoli atractiva por su amplia oferta de comercios y servicios, así como de oportunidades de empleo, es muy demandada para vivir, lo que causa que sea una urbe sumamente densa y urbanizada.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que por habitante debe haber al menos 12 metros cuadrados de áreas verdes; sin embargo, a la capital del país le hacen falta alrededor de 15 millones de metros cuadrados para llegar a la cantidad recomendada.

Como una de las alternativas que han empleado los desarrolladores inmobiliarios es la incorporación de jardines, ya sea verticales, en los techos, o como parte de la infraestructura.

Santiago Morales Broc, director de GDC desarrollos inmobiliarios, menciona que este tipo de edificaciones pueden contrarrestar no solo las temperaturas provocadas por el cambio climático, sino también problemas de la contaminación como el dióxido de carbono.

Natalia Ramirez Ángel, gerente de marca, relaciones públicas y contenidos y de la proptech La Haus, explica que en el centro de Medellín se incorporó un corredor verde conformado por árboles.

“Se registró la temperatura del antes y después y una vez que ya estaban ubicados los árboles la temperatura del centro bajó 3°”, dice la experta.

¿El precio aumenta por esta amenidad?

Natalia Ramirez Ángel y Santiago Morales Broc mencionan que su precio es competitivo y parecido a un departamento que no cuenta con esta amenidad, los precios de los departamentos se pueden encontrar desde los 2 millones de pesos en adelante.

Morales Broc explica que el costo en la construcción al incorporar vegetación, así como la automatización para el riego de las plantas, aumenta entre 5% y 7% en comparación con una infraestructura que no incorpora estos elementos.

Esto exige un inversión en esta parte de la vegetación, ya que de acuerdo con el experto, se realizan gastos no solo en la automatización del riego, también los gastos surgieron al subir los árboles en la estructura, que requieren tiempo.

También agrega que este aumento no se ve reflejado en la venta de los departamentos, es decir que el comprador final no paga por esta incorporación.

Sin embargo, a pesar de los beneficios que ofrecen estas estructuras, para Santiago Morales los compradores aún no despiertan un interés por este tipo de propiedades o todavía no forma parte de sus prioridades en la adquisición de una propiedad.

Agrega que en ciudades donde cobra mayor importancia el cuidado al medio ambiente sí es una prioridad conseguir un inmueble con estas características, pero que en México todavía se rige conseguir una propiedad con base en su precio.

Uno de sus proyectos que se encuentra en la capital lleva tres años en el mercado y tiene 90% de ocupación.

Tipo de plantas que se agregan en los edificios

El arquitecto Gerardo Espinosa agrega que incorporar plantas o vegetación ofrece dos beneficios, uno inmediato y otro a largo plazo. En el primer caso, colocar un árbol enfrente de la fachada genera sombra y menor absorción de calor. La segunda es la evapotranspiración que es el proceso por el cual las plantas absorben energía del sol y convierten el agua en vapor, lo que provoca un cambio en la calidad del aire. El beneficio de largo plazo es que absorben Co2.

De acuerdo con el experto, esto va a depender del lugar en donde se desarrolle la zona, pero que árboles grandes como magnolias, acer negundo o plantas con hojas grandes y largas que proporcionen sombra, como rododendro, palmeras, arces y adelfa, así como suculentas de cualquier tipo que se destacan por ser resistentes al sol.