Desde su apertura en 1977 se convirtió en uno de los museos más visitados de toda Francia. En 2018 más de 250 millones de personas conocieron el lugar. La cifra se redujo durante la pandemia de coronavirus debido a las restricciones sanitarias, sin embargo, la afluencia siguió.
Aunque la cifra se reducirá a cero en 2023, cuando las personas deban dejar de visitar al lugar para dar pie a su transformación, que estará lista en 2027, para el 50 aniversario del lugar, informó la ministra de Cultura del país, Roselyne Bachelot.
Las instalaciones fueron una gran innovación en la década de los setenta y, aunque siguen siendo una muestra de modernidad en la arquitectura para todo el mundo, el sitio necesita actualizarse.
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En la fachada hay instalado amianto y se debe retiar para complir con las nuevas normas de seguridad. También se ampliarán los espacios para hacerlos más accesibles y se dará mantenimiento al resto de las instalaciones.